Koldo LANDALUZE
DONOSTIA
MADAME WEB

Caos y desorden en el universo arácnido

Un nuevo título que certifica el mal estado de forma por el que atraviesa el cine de superhéroes. “Madame Web” no logra aportar nada novedoso al universo cinematográfico de Spider-Man que Sony ha intentado construir en la última década. A pesar de sus esfuerzos con personajes como Venom y Morbius, el estudio ha encontrado muchas dificultades para crear una franquicia coherente sin la presencia del héroe arácnido. El intento más exitoso de Sony hasta el momento ha sido con las aventuras animadas de Miles Morales, pero en el ámbito live action, los resultados han sido inconsistentes.

ESCENAS FRAGMENTADAS

La película se presenta como el intento más ambicioso de la compañía en su proyecto arácnido, centrando la trama en Cassandra Web, interpretada por Dakota Johnson, un personaje con poderes psíquicos precognitivos. Sin embargo, a diferencia del cómic original, la versión cinematográfica de Cassandra es una joven que busca comprender sus habilidades. La trama también intenta establecer la historia de origen de Cassandra como el inicio de un universo más amplio que se conecta con todas las versiones de Spider-Man.

A pesar de esta premisa interesante, el guion -escrito por Matt Sazama, Burk Sharpless, Claire Parker y la propia directora-, resulta vago y genérico. La heroína se presenta de manera limitada y torpe, especialmente cuando las fronteras entre la realidad y su percepción se representan con escenas fragmentadas que carecen de dirección. Los efectos visuales, en lugar de añadir emoción y empaque, se convierten en disoluciones entre escenas sin un propósito claro. Uno de los mayores fracasos de la película radica en la falta de coherencia en la cronología, donde el pasado, el presente y el futuro se entrelazan de manera confusa.