Dabid LAZKANOITURBURU

Pekín prioriza la seguridad, dentro y fuera, sobre una economía «al ralentí»

China inauguró ayer la sesión anual de la Asamblea Nacional Popular (ANP, Legislativo), que ratificará los dos grandes objetivos del gigante asiático: el crecimiento económico, persistente pero que no termina de despuntar como antes tras la pandemia, y la seguridad nacional, incluido el aumento en el gasto militar.

El presidente chino, Xi Jinping, y su primer ministro, Li Qiang.
El presidente chino, Xi Jinping, y su primer ministro, Li Qiang. (Greg BAKER | AFP)

Tras el arranque el lunes de la Conferencia Consultiva Política del Pueblo Chino (CPPCC), que reune a representantes de las minorías étnicas, del mundo empresarial y a figuras del deporte y de la cultura, ayer comenzó la sesión anual de la Asamblea Nacional Popular (ANP), una suerte de legislativo con 3.000 miembros pero que a la postre tiene el mismo poder de decisión que la CPPCC, nulo, ya que se limita a sancionar las decisiones previamente tomadas por la cúpula del Partido Comunista.

La sesión, que durará unos diez días, arrancó con la comparecencia del primer ministro chino, Li Qiang, quien fijó en «alrededor de un 5% del PIB» el objetivo de crecimiento en el presente ejercicio.

Se trata del segundo año consecutivo en el que China se marca ese límite, en comparación con el crecimiento de dos dígitos en las últimas décadas. Algunas voces avisan de que es un objetivo «ambicioso», dado que el año pasado -creció un 5,2 %- partía de una base comparativa relativamente baja, con un 3% en 2022 a raíz de la política de 'cero covid'.

Li reconoció «muchas dificultades (...) por resolver» y que en 2023 algunos problemas que venían de atrás «se volvieron más acusados», entre ellos la caída de la demanda exterior en un marco de falta de demanda nacional y la crisis inmobiliaria.

SEGURIDAD ANTE TODO

Esa previsión de crecimiento augura que la China de Xi Jinping sigue descartando un plan de relanzamiento de la economía de envergadura, por temor a que pudiera poner en dificultades a las finanzas públicas. Por contra, todo apunta a que se reforzarán las medidas de seguridad nacional en todos los frentes, inluido el militar.

Pekín mantendrá el ritmo de aumento anual del gasto en Defensa en un 7,2% hasta los 1,665 billones de yuanes (231.352 millones de dólares), en medio de tensiones en el mar de China Meridional con Filipinas y Vietnam y la mirada puesta en Taiwán, donde Pekín «se opondrá decididamente» a toda «actividad secesionista», advirtió el primer ministro.

Pese a que ello consolida a China como el segundo país con el mayor presupuesto militar del mundo, por detrás de EEUU , el experto en Defensa Zhang Junshe, citado por el diario oficialista “Global Times”, declaró que el aumento del gasto es «moderado y razonable» y la partida destinada al Ejército «está en un nivel bajo» en proporción al PIB.

En el ámbito de la seguridad interna, Pekín amplió el año pasado la tipificación de espionaje y registró sociedades extranjeras de consulta, auditorías e investigación.

Y acaba de ampliar asimismo la noción de secreto de Estado, señal de las prioridades de la era Xi.

Todas estas medidas y otras serán sancionadas por unanimidad y sin debate alguno por el «Parlamento» chino.



Nueva colisión marítima entre China y Filipinas

Filipinas y China se acusaron de otra colisión entre barcos en el mar de China Meridional, en pleno aumento de la tensión en dichas aguas estratégicas.

Manila asegura que tres barcos guardacostas filipinos fueron desplegados para aprovisionar al Ejército filipino y fueron bloqueados y colisionados por guardacostas chinos y la milicia marítima china.

La Guardia costera china señaló que tomo medidas contra la «intrusión ilegal» filipina en aguas adyacentes al atolón Second Thomas del archipiélago Spratly, que ambos países reclaman. Filipinas ha denunciado una barrera flotante china para bloquear a sus embarcaciones alrededor del arrecife Scarborough.

El Tribunal Permanente de Arbitraje de La Haya dio la razón a Filipinas en 2016, pero Pekín no reconoce el laudo y reclama el mar de China Meridional, también frente a Malasia, Vietnam, Taiwán y Brunei. GARA