XOLE ARAMENDI
DONOSTIA

Patxi Xabier Lezama presenta su obra «Sugaar» en New York

“Sugaar”, de Patxi Xabier Lezama, estará expuesta hoy y mañana en New York, ciudad donde el público ya vio su obra hace seis años. «Exponer allí puede brindar una mayor visibilidad y exposición a nivel internacional. También puede ser un desafío, ya que la competencia es alta y el nivel de exigencia es grande», afirma el artista.

La obra «Sugaar», realizada por Patxi Xabier Lezama.
La obra «Sugaar», realizada por Patxi Xabier Lezama. (GARA)

Sugaar. Figura importante en la mitología vasca, considerada una deidad capaz de cambiar de forma. Generalmente, se le representa tomando forma humana o forma de serpiente. Esta capacidad de transformación refleja la dualidad y la naturaleza cambiante de la vida y el mundo.

Patxi Xabier Lezama (Zalla, 1967) presentará su obra “Sugaar” en New York este viernes y sábado. Lo hará en la sala El Barrio's Artspace en el marco del Congreso Mundial de Arte y Cultura (COMAC).

«La presencia de Sugaar en la mitología vasca puede tener diferentes interpretaciones y reflexiones. Algunas posibles reflexiones podrían estar relacionadas con la idea de adaptabilidad y cambio, la importancia de la conexión entre lo humano y lo sobrenatural, o la idea de que la apariencia externa puede ser engañosa», sostiene Lezama.

FERTILIDAD

«En las leyendas vinculadas a Sugaar, podemos analizar la relación entre la serpiente y el poder de transmutación, esta divinidad solía adoptar forma humana en sus encuentros con la diosa Mari. La relación entre Sugaar y la fertilidad se aprecia en la leyenda medieval que sirve como legitimación del linaje de los señores de Vizcaya. Según la crónica de Lope García de Salazar (1454), Sugaar sedujo a la hija del rey de Escocia que se alojaba en Mundaka y la dejó embarazada, naciendo del fruto de esta unión Jaun Zuria (Juan, el Blanco), primer señor de Vizcaya», cuenta.

Le preguntamos por la reflexión que hay tras la obra. «Los seres humanos estamos hechos para tener una conexión con los Dioses y, sin embargo, nos hemos ido separando de ellos», indica al respecto Lezama.

Esta afirmación sugiere que los seres humanos hemos perdido la conexión espiritual con los dioses debido a la evolución de la sociedad moderna y la influencia de la ciencia y la tecnología en nuestras vidas. «Muchas culturas antiguas creían en la existencia de seres superiores que gobernaban el mundo y guiaban a la humanidad, y se comunicaban con ellos a través de rituales y ceremonias religiosas -dice el artista-. Sin embargo, en la sociedad contemporánea, la mayoría de las personas han perdido esta conexión espiritual y se han vuelto más materialistas y centradas en el mundo físico. Esto ha llevado a un sentido de vacío y falta de propósito en la vida de muchas personas, ya que no encuentran significado en la existencia más allá de la búsqueda de la riqueza, el poder y la fama».

En su opinión, «para recuperar esta conexión con los dioses, es importante volver a conectar con nuestra espiritualidad y explorar nuestras creencias religiosas y valores personales y encontrar un sentido más profundo en nuestra existencia».

REGRESO A LA CIUDAD

En enero de 2018 Lezama mostraba su obra en la exposición ‘Migrations: Ocean of Hearts’ en la Spanish Benevolent Society Gallery. Seis años después, el artista vuelve a New York.

Preguntamos al artista por el significado del regreso a la ciudad. «Supone una gran oportunidad y un hito significativo para un artista. New York es conocida como una de las capitales mundiales del arte y alberga una escena artística vibrante y diversa. Exponer en una galería de esta ciudad puede brindar una mayor visibilidad y exposición a nivel internacional».

Al volver a exponer en una galería de New York, un artista puede tener la oportunidad de presentar su trabajo a un público más amplio y diverso, incluyendo coleccionistas, críticos de arte, curadores y otros profesionales del mundo del arte. Esto puede generar nuevas oportunidades de colaboración, ventas de obras y reconocimiento en el ámbito artístico».

«Además, New York permite que el artista se sumerja en un entorno artístico enriquecedor y tenga la posibilidad de establecer conexiones con otros artistas y profesionales del arte. Sin embargo, es importante tener en cuenta que la exposición en una galería de New York también puede ser un desafío, ya que la competencia es alta y el nivel de exigencia es grande. El artista debe estar preparado para enfrentar críticas, competir con otros artistas y adaptarse a las demandas del mercado del arte», dice para finalizar.