Koldo LANDALUZE
DONOSTIA
«EL SALTO»

Tragedias a ambos lados de una valla

La más reciente obra del autor de películas tan impactantes como “Solas” encara con crudeza y un firme compromiso social la compleja realidad de la migración subsahariana hacia Europa.

Zambrano, reconocido por su cine profundamente social y dramático, vuelve a situar en el centro de su narrativa las dificultades y sacrificios que enfrentan aquellos que se aventuran en el arriesgado viaje en busca de una vida mejor.

El largometraje cuenta la historia de Ibrahim, un inmigrante de Guinea Conakry que logra establecerse en Madrid, trabajando como albañil y formando una familia con su pareja Mariama. Sin embargo, su situación irregular lo convierte en blanco fácil de las redadas policiales, y tras ser detenido, es deportado de vuelta a su país de origen, dejando atrás a su esposa embarazada. A partir de este momento, Ibrahim se embarca en un desesperado viaje de regreso, arriesgando su vida para atravesar África y alcanzar la frontera de Melilla, donde se enfrenta a la imponente valla que separa los continentes africano y europeo.

Zambrano aborda esta trama con la clara intención de denunciar las injusticias y la deshumanización que sufren los migrantes subsaharianos, tanto durante su travesía como una vez que logran alcanzar territorio estatal.

A través de la historia de Ibrahim, el director busca otorgar rostro y voz a aquellos que a menudo son reducidos a meras estadísticas en el debate migratorio.

Una de las principales fortalezas de “El salto” radica en su aproximación realista y desprovista de sensacionalismo al drama de la migración. Lejos de caer en la grandilocuencia o el maniqueísmo, la película se centra en resaltar la humanidad de sus personajes, mostrando sus sueños, miedos y esperanzas, así como la forma en la que se enfrentan a situaciones de extrema dureza.