Marcel PENA
BILBO

Expertos explican su papel en la acogida a menores no acompañados

Los jóvenes no acompañados centraron el debate en Bilbo en la charla «Menores en la Frontera. ¿Y ahora qué?», en la que se dio fe de los datos que reflejan las miserias de la ruta canaria, puerta de entrada a Europa de 115.000 personas en los últimos cuatro años, así como del papel de las instituciones europeas, estatales y vascas una vez llegan al continente.

Mesa redonda celebrada en Itsasmuseoa de Bilbo.
Mesa redonda celebrada en Itsasmuseoa de Bilbo. (Monika DEL VALLE | FOKU)

Las jornadas sobre migración, conflictos, mujeres e infancia analizaron ayer la situación de los jóvenes no acompañados con la charla ‘‘Menores en la Frontera. ¿Y ahora qué?’’. La mesa redonda contó con expertos en el tema y responsables de las instituciones vascas y estatales, quienes explicaron su papel en la acogida de menores extranjeros una vez llegan al continente europeo.

Ana Pérez, moderadora del acto organizado por Salvamento Marítimo Humanitario y celebrado en Itsasmuseoa de Bilbo, comenzó su discurso recordando que ayer, se cumplía el 87 aniversario del bombardeo de Gernika, lamentando que, lejos de recordar la historia, hoy en día se está viviendo un «genocidio» en Palestina.

A continuación, el periodista canario Txema Santana narró cuál es la situación en las Islas Canarias. «La nuestra es una de las fronteras más bonitas del mundo, el mar, y a la vez una de las más desiguales, porque delimita a los países de África occidental con un territorio extracontinental de la Unión Europea», dijo. En este sentido, detalló que en los últimos 30 años han llegado a las Islas Canarias 207.000 «supervivientes», destacando que solo en los últimos cuatro han sido 115.000, más del 50% de ese total. Un 15% de ellos eran menores no acompañados. Otro dato a destacar es el volumen de mujeres que viajan con menores, que fluctúa entre un 40% cuando las embarcaciones parten desde Costa de Marfil a un 5% en el caso de Marruecos. Santana también alertó sobre la peligrosidad de la ruta canaria, como demuestra el hecho de que 6.000 personas perdieron la vida en el mar en 2023.

Llegado el turno de las instituciones, la ministra española de Juventud e Infancia, Sira Rego, analizó el proceso en el que se gestó el Pacto sobre Migración y Asilo en el Parlamento Europeo, en un momento en que ella misma era eurodiputada. Rego criticó que el pacto europeo haya eliminado el «derecho a asilo» y contemple las «devoluciones en caliente». «Son criterios asimétricos porque, en función del Gobierno de turno que haya en un país europeo, se tiende a establecer un marco de aplicación u otro», recalcó, lo que acelera las devoluciones en las fronteras. Sin embargo, reconoció que, en el caso de los menores, este marco no se aplica, a no ser que signifiquen una «amenaza para la seguridad nacional».

Poniendo la mira en las instituciones vascas, el asesor de Políticas Sociales en el Gobierno de Lakua, Emilio Sola, dio cuenta de la «corresponsabilidad» mostrada entre el Ejecutivo español y las comunidades autonómicas, denunciando a algunas de ellas por posicionarse en contra del «reparto solidario». En ese sentido, Sola explicó en qué consiste el programa Trapezistak del Gobierno de Lakua, orientado a ofrecer un seguimiento a jóvenes extranjeros de entre 18 y 25 años sin red familiar. En dicho programa, según datos de Sola, desde su creación han participado un total de 606 jóvenes, de los cuales 559 son hombres y 47, mujeres, con altos porcentajes de éxito. El perfil del usuario de Trapezistak es un hombre, de nacionalidad marroquí, en «situación administrativa no resuelta», de 22,7 años de edad media y que vive en el entorno urbano vizcaino. «Es un proyecto presupuestariamente potente y esperamos que el nuevo Gobierno que se va a conformar lo siga manteniendo», valoró Sola.

Por parte del Gobierno de Nafarroa, la Directora de Políticas Migratorias, María Soledad de la Nava, recogió el guante lanzado por Txema Santana y se mostró convencida de que es necesario un reparto del flujo migratorio para apoyar el trabajo realizado por las Islas Canarias. Actualmente, hay 5.400 menores acogidos por el Gobierno canario. Así, de la Nava comentó algunos de los puntos del servicio Kideak de atención integral a jóvenes migrantes sin apoyo familiar en Nafarroa. Entre los aspectos que se trabajan en Kideak, de la Nava mencionó parámetros como la formación, la capacitación en castellano o la mentoría social, «que posibilita a los participantes, pero también a personas de Navarra, a entrar en contacto con otras culturas y conocerse día a día». Además, aborda cuestiones como el «empoderamiento» en el caso de las chicas y «temas de masculinidad» en el de los chicos.

CRÍTICA A LOS MEDIOS

Por último, la directora general de Administración y Promoción Social de la Diputación de Bizkaia, Maite de Iturrate, hizo un alegato de la libertad de los menores no acompañados de «poder elegir adónde ir». Sobre los menores que llegan a Bizkaia, dijo que es un tema «estructural que ha venido para quedarse» y que, como «sociedad absolutamente envejecida», estamos necesitados de «gente que quiere venir a trabajar a construir su historia aquí».

De Iturrate también tuvo palabras para los medios de comunicación, de quienes dijo que «no nos ayudan en absoluto», ya que explican «noticias que no cuentan la realidad y que relacionan a estos jóvenes con la delincuencia». Según la responsable en materia de Promoción Social, esto provoca que, a la hora de abrir un centro de menores en determinadas localidades, la población local se muestre contraria. «A la hora de querer alquilar un inmueble, porque la administración muchas veces no dispone de recursos en propiedad, a veces tienes que omitir parte de la verdad y no hablar. ¿Para qué? Porque si no, nos cierran muchas puertas», confesó.