Alaia SIERRA
GASTEIZ

La gratuidad de la matrícula de euskara eleva las inscripciones de migrantes

Las dificultades para conciliar la vida laboral y familiar con las clases de euskera y tener que adelantar dinero son las mayores trabas para la euskaldunización de los migrantes, según un informe de HABE. La gratuidad en la matrícula ha elevado un 10% el número de inscripciones respecto al año anterior y ya se dan facilidades para la gestión del tiempo disponible para el aprendizaje del euskara.

Jokin Azkue, director de HABE, y el viceconsejero Aitor Aldasoro, en la Comisión.
Jokin Azkue, director de HABE, y el viceconsejero Aitor Aldasoro, en la Comisión. (Raúl BOGAJO | FOKU)

Los mayores problemas para el aprendizaje del euskara por parte de las personas migrantes que viven en Euskal Herria están relacionados con la dificultad para conciliar la vida laboral y familiar con las clases y con la obligación de tener que adelantar dinero son las principales trabas para el aprendizaje del euskara de las personas migrantes que viven en Euskal Herria, según se desprende de un estudio cualitativo realizado por HABE y presentado ayer por su director general, Jokin Azkue, y el viceconsejero de Política Lingüística, Aitor Aldasoro, en una comparecencia en la Comisión de Euskara, Cultura y Deportes del Parlamento de Gasteiz solicitada por EH Bildu.

El eje de la comparecencia se centró en los cursos de acogida para acercar al euskera a personas llegadas del extranjero AISA, que se desarrollan en base a un convenio de colaboración entre HABE y el Departamento de Bienestar Social, Migración y Reto Demográfico del Gobierno de Lakua, que permite su financiación y que sean totalmente gratuitos. «Así superamos el primer obstáculo del adelanto de dinero», manifestó el director general de HABE.

En el curso 2023-2024, 3.407 migrantes cursaron euskara en el sistema de euskaldunización de adultos, 686 de los cuales se matricularon en los 73 grupos AISA organizados. En este curso 2024-2025, cuando ya se aplica la gratuidad de la matrícula de los cursos A1, el número de alumnos ha aumentado un 10% respecto al año anterior.

Para Josu Aztiria, de EH Bildu, esa gratuidad «debería ampliarse» a todos los niveles para dar así un «potente» men- saje: «Estudiar euskera es gratuito». Cree que «hay que dar pasos más firmes» en este sentido y que, «afortunadamente, la gratuidad es una cuestión ampliamente aceptada».

Aztiria se refirió también al que considera el mayor de los problemas, el tiempo disponible de estas personas, que quieren aprender euskara para ayudar a sus hijos e hijas e integrarse mejor. Y planteó la posibilidad de que los trabajadores tanto del sector público como del privado puedan disponer de horas liberadas para estudiar euskara. Esto «puede ser complejo», dijo

Respecto a este problema, Azkue explicó que, por defecto, los grupos de estos cursos se dividen según los horarios más convenientes a cada alumno, tras consultarlo «directamente» con ellos.

El estudio “Diagnóstico de obstáculos que impiden la euskaldunización a colectivos vulnerables procedentes del extranjero” se ha elaborado entrevistando a cinco alumnos y un profesor del euskaltegi de AEK de Andoain y siete alumnos y un profesor de Debabe Udal Euskaltegia. También han contactado con las asociaciones Esperanza Latina y Banaiz Bagara.