El «outsider» que camina de nuevo hacia la cumbre
La escuadra malagueña será la más próxima piedra de toque para los equipos vascos después de que haya regresado de cinco años de mediocridad y errores.
Junto a Laboral Kutxa Baskonia, Unicaja ha representado mejor que nadie el papel de equipo outsider que aprovechó una buena coyuntura económica para elevarse a los altares del basket ACB y de Europa.
Su primer fogonazo llegaba con el subcampeonato de la Liga ACB 1994/95 ante el Barça, en una final marcada por un triple de Mike Ansley que, de haber entrado, hubiera supuesto el título al cuadro andaluz. Su «edad de oro» vino en la década que va de 1999 y 2009, ya que fue en esos años cuando encadenó todos sus títulos -la Copa Korac de 2001, la Copa de 2005 y la Liga ACB de 2006- y finales perdidas -la Korac de 2000, la Liga ACB de 2002 y la Copa de 2009-. Bozidar Maljkovic o Sergio Scariolo lideraron esos años gloriosos, con jugadores de la talla de Jorge Garbajosa, Pepe Sánchez, Walter Herrmann, Stephane Risacher, Marcus Brown, Daniel Santiago, Florent Pietrus, Marcus Haislip, Berni Rodríguez, Fran Vázquez o Carlos Cabezas -o Jon Kortaberria-.
Su competitividad extrema hizo que alcanzara la élite europea, jugando la Final Four de Atenas 2007, amén de alimentar una terrible rivalidad con el Baskonia. Por otro lado, los trienios de la Euroliga le garantizaron un hueco en el futuro continental a la escuadra andaluza.
El estilo «Joanas Plazauskas»
Pero tras la temporada 2008/09 Unicaja empezó a caer en barrena. Aíto García Reneses acabó mal con la escuadra malagueña en 2011. El cambio de técnico por Txus Mateo y Jasmin Repesa hizo caer al equipo malagueño en un pozo sin fondo, quedándose fuera de la Copa y hasta de los play offs de la ACB en la campaña 2012/13. Asimismo, el dinero gastado en jugadores como Jiri Welsch, Saúl Blanco, Omar Cook o Printezis -y más en un contexto de crisis-, no tuvo la respuesta que se esperaba. Si Unicaja ha seguido jugando la Euroliga se ha debido por su exitosa década 1999/2009.
La campaña pasada empezó a verse el renacer de la escuadra andaluza, con la llegada de Joan Plaza y Kuzminskas, procedentes del Zalgiris Kaunas, y Jayson Granger de Estudiantes. El alero lituano es el talento puro, mientras que base uruguayo ha sabido plasmar el estilo de «Joanas Plazauskas», incluso con sus problemas en el juego estático: dura defensa sin concesiones y agresividad en el ataque a campo abierto. Erraron en la Copa, pero en el play off cerca estuvieron de eliminar al Real Madrid.
A día de hoy, pese a sus tumbos en el Top 16, vuelven a liderar la Liga ACB, y tanto en la Euroliga como en la Copa calibran las opciones de los conjuntos vascos en el camino de regreso hacia la cumbre del basket.
David Gil: «Unicaja es un equipo que te hace sufrir mucho con su defensa»
David Gil es el segundo entrenador ayudante de Ibon Navarro, encargado del «scouting» al rival. En el vídeo editado por la web del Baskonia, Gil advertía que su próxima rival europeo, Unicaja, «es un equipo que te hace sufrir mucho con su defensa».
«Es un grupo con mucha solidez», señalaba el técnico. «Su arma defensiva es muy grande. Traban y colapsan continuamente tu juego».
El pasado día 1 Unicaja vencía 76-74 a los gasteiztarras, con un gran partido de Kuzminskas. David Gil avisaba aun así que «pueden jugar con Markovic o con Granger; puede salirse Toolson o Vasileiadis. Puede aparecer cualquiera». GARA
El ascenso de Unicaja coincidió con el de Saski Baskonia, cruzándose ambos equipos en las finales de la ACB de 2002 y 2006, y en la de Copa de 2009. Durante esta etapa ambos clubes alimentaron una feroz rivalidad y ahora ambos quieren remontar tras años de mediocridad.