«El Gobierno quiere manifestar que, sin perjuicio y con el máximo respeto que tenemos al Tribunal Constitucional y del acatamiento que de ésta, como de todas las resoluciones judiciales hacemos, discrepamos del contenido del fallo», ha dicho Ruiz-Gallardón en declaraciones a los periodistas en la sede de su departamento.
El titular de Justicia ha reiterado la «inquebrantable voluntad de lucha permanente contra el terrorismo» del Gobierno español y ha señalado que está a la espera de conocer el contenido de la sentencia y de los votos particulares para saber cuáles son los límites que se establecen a la participación política de Sortu y el margen de la actuación del Ejecutivo.
«Estudiaremos con profundidad la sentencia para saber qué instrumentos se nos da al Gobierno de la Nación para mantener una vigilancia permanente para que en ningún caso se produzca un abuso de esas instituciones democráticas, para que no se produzca un fraude de ley y para que la adecuación de las conductas a la legalidad sea permanente», ha subrayado el ministro de Justicia español.
«A mí me hubiese gustado que la decisión del Tribunal Constitucional mantuviese la decisión del Tribunal Supremo y que, por lo tanto, Sortu siguiera siendo ilegal», ha concluido.
Fernández Díaz
Por su parte, el ministro español de Interior, Jorge Fernández Díaz, se ha expresado en la misma línea y ha manifestado «claramente» su discrepancia con el fallo.
«Reitero de manera muy especial que con Sortu o sin Sortu la izquierda abertzale tiene que condenar el terrorismo, pedir perdón y la disolución incondicional de la banda», ha enfatizado al respecto durante una rueda de prensa en la sede del Ministerio español de Interior.
Ha anunciado también que esperará a conocer la sentencia antes de estudiar un eventual proceso de «ilegalización sobrevenida».