El texto que se abordará en el pleno de hoy viene motivado por la concesión de 9.000 euros al documental ‘Barrura begiratzeko leihoak’, que profundiza en la vida de cinco presos y sus allegados.
En la moción presentada por PSE, PNV y PP se denuncia que la subvención «obedece a la estrategia política defendida por Bildu y por la izquierda abertzale en relación a los presos de ETA, las víctimas y la normalización política», y además constituye «una muestra más de la falta de respeto y solidaridad» del alcalde «hacia las víctimas del terrorismo».
Preguntados por GARA al respecto, PSE y PNV especificaron que su malestar tiene más que ver con las formas que con el contenido, del cual solo se conoce un tráiler. «Nada que decir del documental, pero sí sobre el destino a este tipo de contenidos del dinero público de todos los donostiarras», comentó el portavoz del PSE Ernesto Gasco.
«Nuestra crítica se dirige a la ceguera política que muestra el equipo de Gobierno al gestionar de esta manera unilateral y falta de sensibilidad una cuestión tan delicada», manifestaron a este diario desde el PNV.
El alcalde Juan Karlos Izagirre aseveró que en la comisión de Derechos Humanos «jamás se ha aprobado ninguna ayuda de este tipo porque corresponde al delegado correspondiente o al alcalde». En cuanto a las amenazas de ilegalización, se mostró «sorprendido» porque el Gobierno de Madrid se dedique a «estas políticas de coacción» cuando «están a punto de que les manden de Europa, tienen el problemón que tienen, que están a punto de irse a la ruina».
Tanto Bildu como Herrira coincidieron en que estos obstáculos se deben a otro intento de censura -Herrira recordó los casos de «La fuga de Segovia» o «La pelota vasca»-, contra un proyecto que pretende reflejar «las vulneraciones de derechos que padecen los presos y que sufren cientos de familias».
Medalla de Oro a la familia de Begoña Urroz
El pleno ha votado también una declaración institucional para conceder la Medalla de Oro de la ciudad a la familia de Begoña Urroz, una niña de 22 meses fallecida en Amara en 1960 a causa de una explosión reivindicada por el DRIL (Directorio Revolucionario Ibérico de Liberación).
La declaración se ha votado por puntos. Ha salido adelante el primero, en el que se recoge que se conceda a la familia de Urroz esta distinción, con el apoyo de PNV, PP y PSE y con la abstención de Bildu.
La coalición abertzale ha presentado una enmienda a la totalidad en la que reclamaba el reconocimiento de todas las víctimas de todos los tipos de violencia, que no ha prosperado. El alcalde, Juan Karlos Izagirre, ha indicado que «jamás» se han negado a entregar la Medalla de Oro a la familia Urroz y ha acusado a la oposición de generar «este debate» y «mentir» sobre su equipo de Gobierno.
Ha reclamado la reparación de todas las víctimas y ha opinado que «flaco favor» se les hace con esta «manipulación política« y juego «sucio». Izagirre ha insistido en el compromiso del Gobierno local para reconocer y reparar a todas las víctimas de todos los tipos de violencia.