Más de 2.300 ertzainas ya han recibido formación sobre el uso de los nuevos materiales antidisturbios que el Departamento de Seguridad de Lakua tiene previsto poner en marcha en sustitución de las pelotas de goma.
Estos dispositivos, que la Policía autonómica se encuentra a la espera de recibir, constan de un proyectil viscoelástico que Seguridad considera menos lesivo que las pelotas tradicionales y cuyo impacto «limita el movimiento» de la persona que lo recibe durante un tiempo.
Estos datos se incluyen en una respuesta por escrito de la consejera de Seguridad, Estefanía Beltrán de Heredia, recogida por Europa Press, a una pregunta de EH Bildu en relación a este asunto.
El anterior Gobierno de Lakua se comprometió a sustituir las escopetas lanzapelotas tradicionales por unos dispositivos menos lesivos después de la muerte de Iñigo Cabacas en abril de 2012 tras recibir el impacto de una pelota de goma lanzada por la Ertzaintza. Los hechos están siendo investigados por un juzgado de Bilbo.
Pese a ello, unas declaraciones de un responsable de la Ertzaintza reabrieron recientemente la opción de que se sigan usando esas pelotas. Y efectivamente, en la respuesta de Beltrán de Heredia se incide en el nuevo material pero se deja claro que las pelotas no se eliminarán por completo, sino que su uso se restringirá a «las unidades especializadas» con mayor formación en materia antidisturbios, «en ocasiones determinadas».
En cuanto al nuevo material, la consejera explica que el impacto de los nuevos proyectiles, que son de material viscoelástico, «se considera inhabilitante muscular y limita el movimiento de una persona por un tiempo».
Respecto a la comparación de sus efectos con el de los proyectiles de goma tradicionales, afirma que la Ertzaintza está estudiando este asunto, puesto que «no se conocen trabajos realizados al efecto».
En otra pregunta, EH Bildu pide explicaciones sobre la gestión del «caso Cabacas». En su respuesta, la consejera recuerda que está judicializado y se remite a las responsabilidades, «si las hubiere», que dicte el juez.