Esta moción de censura, que necesita de los votos del PSN para prosperar, es a juicio de Cerdán un «aprovechamiento político» de unas circunstancias «muy lamentables» que se dan en este momento en Nafarroa.
Antes de «lanzarse» a una moción de censura, ha comentado Cerdán, hay que hablar con el resto de los grupos y, si se comprueba que no va a prosperar, presentarla es «una equivocación» porque puede servir para que la presidenta navarra «coja alas».
El previsible rechazo a la moción en el Parlamento «puede parecer que es un revulsivo para Yolanda Barcina en el momento más difícil que vive Navarra en muchos años», ha dicho Cerdán, quien ha pedido la dimisión de la también líder de UPN para que «cambie la dinámica de inacción de este Gobierno».
El secretario de Organización del PSN ha rechazado «las formas» con las que EH Bildu pretende cesar a Barcina y ha considerado que esta formación desea obtener un «rédito electoral» con su iniciativa, porque «están más en el cortoplacismo que en ver soluciones a futuro».
En ese sentido, ha asegurado que «los representantes de los ciudadanos deben ponerse de acuerdo en el Parlamento de Navarra para sacar esto adelante».
Jiménez también pide la dimisión de Barcina pero no apoyará la moción
El secretario general del PSN, Roberto Jiménez, dice que Yolanda Barcina es «un lastre» para Nafarroa y, al igual que su compañero, ha reclamado su dimisión, aunque no está dispuesto a apoyar la moción por que la considera «oportunista».
«Cuando se presenta una moción de censura se presenta para ganar y sabían que es una moción de censura que está abocada absolutamente al fracaso, por lo que es tirar con pólvora mojada», ha asegurado.