El consejero de Fomento de Nafarroa, Luis Zarraluqui, confirmó el viernes pasado que el TAV solo tendría 60 kilómetros en el territorio y que no iba a haber conexión por Iruñea con la denominada «Y vasca» ni por Castejón con la línea Madrid-Zaragoza-Barcelona, y planteó una solución provisional consistente en implantar un llamado «tercer hilo», que consistiría en situar una tercera vía entre las dos existentes para que puedan circular por ellas trenes en ancho europeo.
Solo su formación y el PP apoyan esta solución. El portavoz parlamentario de UPN, Carlos García Adanero, ha achacado esta situación a la «inoperancia de los diferentes gobiernos de España», ha sostenido que «la situación es la que es» y que prefieren «poder dar una solución en este momento que no hacer nada».
La alternativa del «tercer hilo» también es apoyada por el PP, cuyo portavoz, Enrique Martín, ha insistido en que lo importante es que «un proyecto que se ha iniciado se complete y tenga continuidad en Aragón y la Comunidad Autónoma Vasca». En su opinión, con la solución propuesta por UPN Nafarroa no va a quedar aislada.
El portavoz del PSN, Roberto Jiménez, ha calificado de «mala noticia» la propuesta y ha defendido que la alta velocidad es «fundamental» para el futuro y que no van a renunciar a ese tren.
Maiorga Ramírez (Bildu) considera «un despropósito de tremenda envergadura», un «auténtico disparate», la decisión de «construir un tramo absolutamente aislado, sin ningún tipo de sentido ni logístico, ni social, ni estratégico», que además «va a encarecer los servicios y va a aislar a la zona media de su posibilidad de acceder al tren como transporte de mercancías».
Ha dicho que habrá que ver cómo explica la presidenta, Yolanda Barcina, «la sarta de mentiras vertidas en torno al TAV en los últimos años», ya que, en su opinión, es «falso que tuviese ninguna garantía, son falsos los pilares con los que pretendían justificar la importancia de esta obra».
A juicio de la portavoz de Aralar-NaBai, Asun Fernández de Garaialde, es «totalmente innecesario» que en un momento de crisis se realice este proyecto, por lo que ha pedido que «se rescinda el convenio con Madrid, se paralicen las obras y se estudie la forma de valorar lo que supone la rescisión de las obras».
El portavoz parlamentario de I-E, José Miguel Nuin, ha apuntado igualmente que es «un despropósito, un absurdo mantener la construcción de un tramo de alta velocidad» en Nafarroa, por lo que ha dicho que espera que el viernes el Gobierno de UPN se replantee su posición y anuncie que «en estas condiciones Navarra no va a acometer la irresponsabilidad de comprometer recursos en un proyecto de estas características».
También ha criticado la actuación de UPN el parlamentario no adscrito de Geroa Bai Manu Ayerdi, quien ha aludido a las «implicaciones tremendas» que conlleva esa decisión.