El PP ha llevado al Parlamento de Gasteiz el debate sobre el término de «presos políticos», con una propuesta en la que se remarca que «tales conceptos hacen daño al sistema democrático». El Parlamentario del PP Borja Sémper ha señalado que «los presos de ETA no son presos políticos. Porque no están condenados por sus ideas, sino por extorsionar, por matar. Las víctimas de ETA sí son víctimas políticas porque fueron asesinadas en nombre de un proyecto político totalitario», ha proclamado.
La formación derechista ha acordado con el PSE una enmienda transaccional a su propuesta, que finalmente ha sido aprobada por la Cámara gracias a la abstención del PNV. En la misma, el Parlamento declara «con total rotundidad que no existen presos políticos ni en Euskadi ni en el conjunto de España; y, por eso mismo, rechaza contundentemente la utilización de dicho término para definir a los presos de la banda terrorista ETA, que se encuentran en prisión por delitos perfectamente tipificados en el Código Penal».
Además, la Cámara manifiesta que «no existen problemas para defender las ideas políticas, siempre que se expresen en el marco de la legalidad».
En su defensa de la iniciativa, Sémper ha afirmado que «aprobar este proyecto de ley es un paso obvio pero necesario para construir un futuro mejor. Dejar claro que en España, en Euskadi, en nuestro Estado de Derecho, no existen presos políticos».
De la misma manera se ha pronunciado el representante del PSE Rodolfo Ares, quien ha incidido en que «por mucho que Sortu y EH Bildu insistan en que hay presos políticos, eso no es cierto». «Hay personas en prisión por pertencer a ETA y cometer delitos. Esos delitos deben ser perseguidos por diversas policías para que sean condenados por tribunales de justicia», ha asegurado.
Gorka Maneiro, de UPyD, más allá de este proyecto de ley, ha defendido los planteamientos de su enmienda, en la que reclamaba que la utilización del término «preso político» sea castigado penalmente. A su juicio, emplear esta terminología supone «defender a ETA», por lo que ha exigido que «el negacionismo a términos terroristas» sea incluido en el Código Penal.
Desde las filas de EH Bildu, cuyos parlamentarios han portado camisetas a favor del muro popular, Julen Arzuaga ha recordado las últimas aportaciones de Amnistía Internacional sobre los presos, al tiempo que ha criticado la «justicia de mala calidad» que se aplica en la Audiencia Nacional y en el Tribunal Supremo.
Tras constatar que el colectivo de presos vascos recibe un tratamiento diferenciado por parte de las instituciones españolas, ha defendido la libertad de expresión y ha solicitado que prevalezcan la palabra y las ideas por encima de las prohibiciones.
Desde el PNV, Maribel Vaquero ha invitado a todos los partidos presentes en el Parlamento autonómico a dejar a un lado «el teatro», y a participar en este tipo de debates de forma «honrada». La formación jeltzale ha planteado que este tipo de cuestiones sean debatidas en la Ponencia de Paz y Convivencia y ha tendido la mano a PP y UPyD para que se sumen a la misma.