Durante su declaración ante el juez de la Audiencia Nacional española Pablo Ruz en el marco de la causa que investiga la supuesta contabilidad B de la formación, Del Burgo ha concretado que recogió en el despacho del extesorero Luis Bárcenas en la sede del PP «seis o siete sobres marrones» con dinero en efectivo que posteriormente entregaba a Ayesa «en bares o cafeterías de Pamplona».
No obstante, Ayesa ha contradicho esta afirmación, asegurando que la cantidad total fue mucho mayor, ya que percibió los sobresueldos durante toda la legislatura, que se prolonó hasta el año 1995.
Ambos han declarado hoy como testigos ante el juez Ruz, y los dos lo han hecho por videoconferencia, desde el juzgado de Iruñea. Del Burgo ha asegurado que los pagos buscaban convencer a Ayesa de que se incorporase al Ejecutivo foral, el primero de UPN tras su coalición con el PP.
Además, ha indicado que fue el extesorero, Luis Bárcenas, quien se los entregó. Sin embargo, Ayesa ha añadido que los pagos sirvieron para saldar la deuda electoral que él mismo había contraido para afrontar una antigua campaña de UCD. Un déficit que ascedía a los 21 millones de pesetas.
Del Burgo ha querido destacar de su declaración que en el PP «no había sobresueldos», palabra que considera «peyorativa», aunque sí a personas que ejercían funciones, como secretarios de área o vicesecretarios, que percibían «una retribución compatible», por lo que «la ilicitud -ha remarcado- no existe por ningún lado».
Abascal no recuerda quién le entregó el dinero
Por su parte, el concejal del PP en Amurrio, Santiago Abascal, ha reconocido ante el juez que recibió 12.000 euros («algo menos de dos millones de pesetas») procedentes de Génova en 1999, aunque remarca que «no recuerda» quién se los entregó.
El edil y antiguo juntero en Araba ha reiterado la versión que ya ofreció nada más destaparse el escándalo de «los papeles de Bárcenas», que fue compensado por su partido para hacer frente a las reparaciones en su tienda, que había sido dañada por un ataque. De hecho, esta cantidad aparecía únicamente en la supuesta contabilidad paralela que manejaba el extesorero, pero no en la oficial.
«Me dieron el dinero en efectivo por compensación por el atentado», ha señalado ante los medios, después de media hora en el despacho del juez. Abascal ha acudido a la sede del tribunal español acompañado por su hijo, Santiago Abascal, presidente de la Fundación para la Defensa de la Nación Española.
«El partido me ayudó, porque tengo que recordar que en 1999 sufrí 19 ataques de terrorismo callejero», se ha explicado. Bajo este argumento ha justificado no recordar quién le dio el dinero ni porqué la entrega fue en metálico. «Ese año, de lo que estaba preocupado era de salvar mi vida y la de mi familia», ha señalado. Posteriormente, ha exhibido dos ejemplares de ‘El Correo’ y el ‘Diario de Álava’ con noticias sobre los ataques a su negocio.
Abascal estaba citado como testigo por Pablo Ruz, magistrado de la Audiencia Nacional española, que investiga la supuesta contabilidad «B» del partido que lidera Mariano Rajoy. Además de Abascal, hoy estaban citados los dirigentes del PP de Nafarroa, Jaime Ignacio del Burgo y Calixto Ayesa, quien no ha realizado declaraciones ante los medios de comunicación, y el exministro de Medio Ambiente durante el Gobierno de José María Aznar, Jaume Matas.