«Morsi y el resto de líderes de los Hermanos Musulmanes que se encuentran actualmente detenidos han de ser liberados o sus casos han de ser revisados de forma transparente y sin retraso», ha afirmado el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki Moon.
Asimismo, ha solicitado a todos los actores políticos y sociales del país «que actúen con la máxima moderación», al tiempo que ha subrayado su apoyo al «derecho de todos los egipcios para celebrar manifestaciones pacíficas».
En este sentido, ha reiterado su llamamiento en favor de un diálogo nacional y un proceso de reconciliación «inclusivo». «El objetivo debe ser avanzar por un camino pacífico hacia el retorno total al control civil, al orden constitucional y a un Gobierno democrático», ha remachado.