El alcalde de Burgos, Javier Lacalle, ha anunciado este martes la paralización de las obras de Gamonal en rueda de prensa, en la que ha dicho que «se abre un paréntesis» que ha estimado que no debería ir más allá de los quince o veinte días, que van a aprovechar para dialogar en una comisión que se creará para este fin.
En la comisión participarán los grupos políticos municipales, las asociaciones de vecinos, también las contrarias al proyecto de construcción de un bulevar en Gamonal, y técnicos del Consistorio.
Preguntado por los periodistas sobre el alcance o posibles límites de esa comisión, el alcalde ha dicho que «no es momento para hablar de líneas rojas, sino de ampliar acuerdos y un consenso en el que el Ayuntamiento lleva dos años trabajando y que ha supuesto varias modificaciones del proyecto inicial para incluir sugerencias y alegaciones de particulares y colectivos».
«Para el Ayuntamiento lo importante es el mayor bienestar para cada ciudadano de Burgos y eso está por encima de cincuenta obras», ha asegurado el regidor.
Se ha mostrado convencido de que, con esta decisión, se paralizarán las tensiones de los últimos días y ha pedido responsabilidad a todas las partes que se hayan podido ver implicadas.
El regidor ha lamentado la paralización de las obras provocada porque no se ha podido garantizar durante estos días la seguridad de los equipos y personal de las empresas adjudicatarias de la obra.
En este sentido, el vicealcalde, Ángel Ibáñez, ha afirmado que, hasta ayer, la evaluación de daños que ha realizado el Ayuntamiento en mobiliario y bienes públicos por las protestas de los últimos días supera los 50.000 euros.
Ha recordado que a esta cantidad habría que sumarle los daños en efectos de la propia empresa y los que se han producido en otros bienes privados como son las sucursales de entidades bancarias de la zona que han resultado dañadas.