Aimar ETXEBERRIA DONOSTIA

Gipuzkoa concreta un plan integral para el cierre de los tres vertederos

La construcción de tres plantas de compostaje, una planta de tratamiento mecánico-biológico y un depósito de inertes que incluye el proyecto de la Diputación de Gipuzkoa permitirá la clausura de los vertederos de Urteta, Lapatx y Sasieta entre los años 2014 y 2015.

La Diputación Foral de Gipuzkoa ha elaborado un plan que tiene como objetivo una gestión «eficiente y sostenible» de los residuos, el cual pasa por tener un sistema autosuficiente de gestión de residuos, sin incineración ni vertederos contaminantes. Fuentes de la institución foral añaden que el proyecto elaborado será respetuoso con el medio ambiente y la salud de la ciudadanía y que permitirá, además, un importante ahorro en recursos y dinero.

La solución que pretende desbloquear el conflicto de los residuos en Gipuzkoa prevé la construcción, durante este y el próximo año, de plantas de compostaje, una planta de tratamiento mecánico-biológico (TMB) y un deposito de inertes para la fracción resto. Todo ello acarreará, de forma paralela, el cierre de los tres vertederos del herrialde: Urteta (Zarautz), Lapatx (Azpeitia) y Sasieta (Beasain). El proyecto de la Diputación ya está en marcha, con el inicio de una de las tres plantas de compostaje en Epele (Bergara).

La iniciativa de la institución foral se sitúa en un contexto sin incineración tras el acuerdo logrado por GHK en noviembre del año pasado con las empresas constructoras de la incineradora de Zubieta, tras la cual, según fuentes de la propia Diputación, «se ha abierto en Gipuzkoa un nuevo escenario que permite una política más sostenible».

El reciclaje, la base del proyecto

La base del proyecto de la Diputación es una tasa de reciclaje en la línea de lo previsto por el plan de residuos PIGRUG, aprobado por las Juntas Generales en 2002, que recoge una tasa de reciclaje del 60% para 2016, lo que supondría un total de fracción resto de 130.000 toneladas. Cabe señalar que la tasa de reciclaje estaba en torno al 33% en 2012, y que en 2013 era cercano al 38%.

En ese sentido, todo el material que se recoge selectivamente será tratado en tres plantas de compostaje, además de en los centros para vidrio, papel y envases ligeros ya existentes. Una de las plantas de compostaje que se prevén es la de Lapatx, que ya está activa; otra sería la de Epele, que se encuentra en construcción y se prevé que entre en funcionamiento para finales de año; y la tercera, que se ubicará en Zubieta, comenzará en 2015 a recoger la materia orgánica. De ese modo, y con las tres infraestructuras en activo, se podrá llegar a dar tratamiento a un total de 80.000 toneladas de materia orgánica anualmente, hecho que conllevaría que toda la materia orgánica recogida selectivamente fuera tratada en el territorio.

La planta de TMB, en Zubieta

Junto con las tres plantas de compostaje, el proyecto de la Diputación incluye una planta de tratamiento mecánico-biológico (TMB) con capacidad para recibir hasta 170.000 toneladas anuales -cuando se prevé que la fracción resto sea de 130.000 toneladas en 2016- y cuyo objetivo es, por un lado, la recuperación para el posterior compostaje o reciclaje de parte de los residuos y, por otra, la eliminación de las posibles emisiones contaminantes a la atmósfera -gases- y al subsuelo -lixivados-. Mediante estos dos procesos la materia se verá reducida a la mitad y los residuos que no se han podido recuperar -se calculan en 65.000 toneladas- serán inertizados y trasladados a un depósito, cuya localización se concretará a lo largo de este año. El plan incide en que tanto la planta de TMB como el depósito de inertes entrarán en funcionamiento a finales de 2015.

En ese sentido, la construcción de las infraestructuras mencionadas -las tres plantas de compostaje, la planta de TMB y el depósito de inertes- permitirán la desaparición de los actuales vertederos contaminantes, y es que la puesta en funcionamiento de las infraestructuras antes mencionadas traerá, en paralelo, la clausura de los vertederos de Urteta, Lapatx y Sasieta.

Con el proyecto en mano, fuentes de la Diputación afirman que esta iniciativa establece un sistema «saludable, sostenible y económico» de gestionar los residuos que se generan en Gipuzkoa. «Es un compromiso con nuestra ciudadanía, con las generaciones futuras y también con nuestro entorno», agregan.

Presentación a los partidos

El diputado de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, Iñaki Errazkin, se reunirá mañana y el miércoles con los partidos que cuentan con representación en las Juntas Generales con el objetivo de presentarles la propuesta y debatir sobre ella. Desde la Diputación pretenden que dichas reuniones sean un primer contacto y esperan que los grupos políticos actúen con «responsabilidad», al considerar que «son tiempos de acuerdo; es lo que reclama la ciudadanía guipuzcoana». Por ello, esperan profundizar en la propuesta para llevarla adelante con acuerdos de manera que, de una vez por todas, se ponga fin al problema de los residuos.