Pernando Barrena ha ofrecido una rueda de prensa en la que ha valorado el último comunicado de ETA como una noticia de «gran calado» que «da solidez al proceso de paz» y al anuncio de la puesta fuera de uso operativo de parte de su arsenal verificado por expertos internacionales el pasado mes de febrero Asimismo, ha destacado que «confirma la voluntad de esta organización para seguir avanzando en el desarme hasta el final».
El portavoz de Sortu ha resaltado que la «gran aportación» del comunicado es que ETA evidencia su disposición a «dejar de ser un actor armado» y «se asegura la irreversibilidad de esa condición procediendo a desmantelar sus estructuras militares».
Ha afirmado que «lo que realmente le interesa a la sociedad vasca es que las armas desaparezcan de una vez por todas del conflicto político vasco». Por ello, ha insistido en que con esta decisión «ETA avanza hacia la conversión en una organización totalmente desarmada» y eso es, a su entender, «lo que es exigible en términos de paz y normalización política».
«A partir de ahí las peticiones de disolución podrán plantearse, pero desde ópticas políticas interesadas, pero no desde el interés del proceso de paz», ha añadido.
A su entender, «sería deseable que los agentes gubernamentales y los partidos que los sustentan se comprometieran a no utilizar la violencia o apoyarse en su uso para mejorar sus posiciones políticas o combatir el independentismo. Eso sí que sería una aportación de primer orden al proceso de paz», ha opinado.
Boicot gubernamental
El portavoz de Sortu ha resaltado que el «nuevo tiempo» que se ha abierto ha sido posible «gracias a la parte vasca» y por encima del «boicot» que practica el Gobierno de Mariano Rajoy.
En este sentido ha señalado que «si el desarme no avanza a la velocidad» que se quisiera es «porque el Gobierno español no se implica y lo obstaculiza».
Tras indicar que no entrarán en «valoraciones de las valoraciones», ha señalado que para saber si el anuncio de ETA es positivo o negativo «solo hace falta preguntarse si acerca a la paz o no» y Sortu, ha remarcado, cree que «rotundamente sí nos acerca a la paz y a las soluciones definitivas que necesita este país. La sociedad vasca está viviendo este tema sin ansiedades porque sabe que las decisiones principales, al menos por parte de ETA, ya están tomadas y que es Madrid quien ralentiza el avance del proceso de paz».
Barrena ha reconocido que a ETA le «resta» un «papel importante» en lo referente a la «situación de sus militantes» y al proceso de desarme que se debe llevar adelante «con la intervención de un agente gubernamental».
«Lo exigible a ETA en estos momentos es que culmine el proceso de desarme con la mayor celeridad posible y lo exigible es que todo esto se lleve a la práctica también con la intervención de un agente gubernamental para que pueda hacerse a la mayor brevedad y con todas las garantías posibles», ha reiterado.