Mahmud Abbas ha condenado el ataque cometido hoy en una sinagoga de Jerusalén que ha provocado seis muertos, entre ellos los autores, dos palestinos. La presidencia palestina ha querido insistir en su compromismo en la busca de una solución. «Condenamos todo ataque que tenga como objetivo a civiles», ha asegurado Abbas.
A su vez, ha exigido el fin de las provocaciones de Israel: «Pedimos el fin inmediato de las acciones israelíes dentro de la mezquita de Al Aqsa y el fin de las provocaciones del gabinete de ministros israelí».
Seis personas han muerto hoy, entre ellas los dos presuntos atacantes, en una sinagoga del barrio Har Nof de Jerusalén. Según la Policía israelí, quienes han realizado la acción han sido identificados como miembros del Frente Popular de Liberación de Palestina.
Husam Badran, portavoz de Hamas en Cisjordania, por su parte, ha vinculado el ataque con la muerte de un conductor palestino de autobús, que apareció ahorcado en la jornada de ayer.