Según ha podido saber NAIZ de fuentes judiciales, se trata de Agustin Zugasti Arizmendiarrieta, Juan Bautista March Fabregues e Iván Fernández de Landa Bercedo. Se les cita como imputados por posible «malversación de caudales públicos» y «falsificación de documentos», tras la querella presentada por la Diputación de Gipuzkoa. Los tres tuvieron que ver con la liquidación de la obra, realizada en junio de 2011 (apenas una semana antes del relevo en Diputación). Uno era responsable de Bidegi, otro director de la obra (en el tramo Eskoriatza Iparra-Arrasate) y el tercero, representante de la empresa contratista.
El asunto ha sido descubierto este año, cuando técnicos de Bidegi buscaban sitio para los sobrantes de tierra de las obras de la autovía entre Antzuola y Bergara y descubrieron que el depósito de Basagoiti-2 no estaba lleno, como se pensaba. Los análisis posteriores permitieron descubrir que faltan más de 900.000 metros cúbicos respecto a lo pagado en junio de 2011, una cantidad enorme, que permitiría llenar el estadio de Anoeta por hacer una comparación de referencia.
Por aquella tierra inexistente se abonaron 500.000 euros, a lo que la Diputación actual suma los 900.000 pagados después por la supuesta no disponibilidad de Basagoiti-2 y dos millones más por lo abonado de más en varias zonas de excavación, lo que suma 3,4 millones de euros.
La admisión de la querella suponía la confirmación judicial de que las sospechas están fundadas. En las últimas semanas diversos dirigentes del PNV habían situado esta querella como una muestra de acoso por parte de EH Bildu. En aquel momento Bidegi estaba dirigido por Borja Jauregi, exalcalde de Hondarribia por la formación jelkide y fallecido el pasado mes de julio tras una larga enfermedad.
Zugasti y March tendrán que declarar el 29 de enero, e Iván Fernández de Landa, el 30. Será en el Juzgado de Azpeitia, el correspondiente al área en que ocurrieron los hechos investigados.