Iribas ha reivindicado la vigencia y la validez de la Ley del Vascuence en una comparecencia en la que ha presentado el mapa del euskara, un estudio elaborado por el Ejecutivo foral que analiza la evolución del idioma en el periodo comprendido entre 1991 y 2001.
En base a esos datos, Iribas ha defendido que un análisis serio de la realidad sociolingüística del herrialde «no justifica» la proposición para la modificación de la Ley del Vascuence que se está tramitando en el Parlamento de Nafarroa.
Según ha detallado el consejero al presentar el estudio, la población bilingüe ha pasado en Nafarroa del 9,9% de 1991 al 11,8% en 2001 y al 13,68% en 2011; los bilingües pasivos –entienden, pero no hablan– han aumentado del 4,6%, al 8,2 en 2001 y al 10,4% en 2011 y la cifra de los que no conocen el euskara ha descendido del 82,6%, al 78,4% y al 74,08% en 2011, respectivamente.
En el caso de la denominada «Zona Vascófona» el porcentaje de bilingües es del 58,2% y el de bilingües pasivos del 13%; en la llamada «Zona Mixta», los bilingües representan el 12,41% y los bilingües pasivos el 8,8% y en la «No Vascófona» los bilingües han aumentado hasta el 3,82% y los bilingües pasivos hasta el 7,63%.
Iribas ha empleado este estudio para defender la Ley del Vascuence y ha aludido a los datos de matriculación que, a su juicio, constatan que «los centros concertados están atendiendo a la demanda existente y la previsible con plenas garantías».
El titular de Educación ha destacado la «importancia de mantener el equilibrio» en el sistema educativo y, en esa línea, ha apelado a la unidad de las fuerzas «no nacionalistas» para ser capaces de mantener espacios de acuerdo en torno al euskara frente a «los nacionalistas» que buscan «una escuela pública euskaldun», que conlleva «hacer que el euskara sea oficial en toda Navarra, con lo que supone de derecho de conocerlo y deber de estudiarlo».