Arantxa Manterola
Baiona

Testimonios punzantes en el foro sobre Tortura e Impunidad

Con la sesión de esta tarde ha finalizado el simposio sobre Tortura, Memoria e Impunidad organizado por la Facultad de Baiona. El foro abierto al público ha sido seguido con gran atención por una sala repleta en la que se han podido escuchar testimonios desgarradores de varias personas que han sido víctimas de torturas.

Gela beterik izan da gaurko saioan ere. (Bob EDME)
Gela beterik izan da gaurko saioan ere. (Bob EDME)

Tras la introducción de la Decana de la Facultad de Sicología de la Universidad Alberto Hurtado de Santiago de Chile, Elizabeth Lira que ha manifestado con contundencia que «ninguna paz puede hacerse sobre la base de la negación de los abusos y malos tratos», varias personas que han sido torturadas han relatado en directo sus traumáticas experiencias y las consecuencias que de ellas se han derivado.

Así, se ha podido escuchar, entre otros, a Mourad Benchellali, ciudadano francés que estuvo preso en Guantánamo y que ha escrito un libro titulado ‘Viaje al infierno’ donde detalla los años de auténtico martirio que pasó allí y también los posteriores en los que estuvo preso en el Estado francés. Como «infierno» ha calificado también Ixone Fernández su detención de cinco días cuando fue arrestada en Cádiz por la Policía Nacional en 2005 por orden del juez Garzón en las denominadas «operaciones preventivas». Su narración no se ha limitado a esos días sino que ha explicado con pelos y señales la dificultosa reconstrucción personal tras su paso por la cárcel y el proceso del que, finalmente, fue absuelta.

Revelación de Torrealdai

A su testimonio le ha seguido otro no menos intenso, el de Juan Mari Torrealdai, que en perfecto francés ha referido su caso cuando fue detenido en la operación contra Euskaldunon Egunkaria como no lo había hecho nunca hasta ahora. Su decisión de hacerlo tan pormenorizadamente ha venido favorecida, por el «marco académico y el carácter internacional del foro», según ha afirmado. En ese contexto, al final de su intervención ha revelado que sufre un cáncer de médula ósea y ha manifestado su «convicción personal», así como la de su siquiatra, de que es «secuela directa de las torturas que sufrí».