Geroa Bai comenzará mañana las conversaciones con el resto de formaciones con representación en el Parlamento navarro de cara a impulsar la creación del Gobierno del cambio en Nafarroa. Al ser la primera fuerza entre las que apuestan por un cambio en Nafarroa corresponde a Geroa Bai liderar esta proceso, lo que ha sido asumido por el resto de grupos.

Su cabeza de lista, Uxue Barkos, explicó que han creado una comisión negociadora para llevar adelante este proceso de conversaciones. Además de la propia Barkos, serán Itziar Gómez, Manu Ayerdi y Koldo Martínez quienes se reunirán con las otras fuerzas. Durante la jornada de ayer, Barkos mantuvo los primeros contactos telefónicos y de manera informal con representantes de las demás formaciones.

La intención inicial de Geroa Bai es comenzar estas conversaciones con los partidos en orden de menor a mayor representación. De este modo, mañana comenzarían, en principio, con I-E y PP.

Barkos subrayó que su objetivo es conversar con todas las formaciones, incluidas UPN y PP, aunque dejó claro que estas formaciones están excluidas del futuro Gobierno del cambio debido a las posiciones que mantienen.

No fue tan categórica a la hora de descartar al PSN, aunque dejó claro que es a la formación de María Chivite a la que corresponde decidir qué postura adopta. «Aunque en estos momentos sus votos no son necesarios, tienen la puerta abierta para trabajar por el cambio con lealtad», señaló Barkos.

Sin embargo, esta presencia no es tan bien vista por otras fuerzas que sí son imprescindibles para impulsar el cambio político y social en Nafarroa, como EH Bildu y Podemos.

En el caso de la coalición soberanista de izquierda, Adolfo Araiz volvió a insistir ayer en que el acuerdo por el cambio en Nafarroa debe articularse en torno a las cuatro formaciones que se han mostrado claramente a favor de esta opción, que son la propia EH Bildu, Geroa Bai, Podemos e I-E.

Laura Pérez, cabeza de lista de Podemos, fue también muy clara al descartar al PSN de las fuerzas que deben impulsar el cambio en Nafarroa.

Pérez también fue muy tajante a la hora de subrayar que la política de alianzas de Podemos en Nafarroa la decidirán los afiliados navarros a través de la correspondiente asamblea ciudadana en el herrialde. Volvió a repetir que la dirección estatal de Podemos no influirá en lo que decidan los afiliados navarros. «Se está difundiendo la idea de que Madrid no nos deja decidir en Navarra y eso no es cierto. Madrid no nos va a condicionar», destacó Pérez.

Preguntada por las declaraciones que Pablo Iglesias realizó durante la campaña en las que señaló que reclamarían a EH Bildu «una condena del terrorismo» para alcanzar acuerdos, Pérez respondió que han realizado propuestas para avanzar en el proceso de paz y reconciliación a través del reconocimiento de la verdad, la justicia y la reparación de todas las víctimas. Además, añadió que a otras formaciones habría que reclamarles condenas de los crímenes franquistas o de la violencia patronal.

Tanto Podemos como EH Bildu subrayaron la importancia de alcanzar un acuerdo programático que siente las bases del Gobierno del cambio, aunque Araiz mostró también su disposición a que su grupo forme parte de ese Ejecutivo.

Pérez se mostró más interesada en influir en las políticas que lleve a cabo ese Gobierno que en formar parte del mismo. «Aspiramos a ser un revulsivo en las nuevas formas de hacer política», señaló.

En esta línea destacó que las prioridades de Podemos son que el Gobierno del cambio apueste por el rescate ciudadano, impulse una reforma fiscal, lleve a cabo una auditoría de la deuda y opte por la transparencia institucional.

Mientras Geroa Bai asume su papel en la formación del Gobierno del cambio, EH Bildu hace lo propio en el Ayuntamiento de Iruñea. De este modo, su cabeza de lista, Joseba Asiron, anunció que comenzará una ronda de partidos para conseguir un Consistorio «inclusivo y de izquierdas» y que tenga como características fundamentales la pluralidad y la inclusión, además de garantizar la participación de la ciudadanía en la toma de decisiones.

«En la calle ya se percibía esa mayoría social por el cambio. Nuestro reto era llevar esa mayoría social de la calle a las instituciones. No ha sido fácil, pero ya lo tenemos», destacó Asiron.

UPN logró diez concejales, pero su único apoyo se limita al PSN, que tiene tres, por lo que no puede alcanzar la mayoría absoluta establecida en catorce ediles. Frente a este bloque, EH Bildu, que ha sido la segunda fuerza con cinco concejales, puede recibir los apoyos de Geroa Bai (cinco), Aranzadi (una candidatura vecinal apoyada por Podemos, tres) e I-E (uno) para alcanzar la Alcaldía.

La buena sintonía que se percibe entre las fuerzas del cambio para el Gobierno, se siente también en el Ayuntamiento de Iruñea. Así, Itziar Gómez, cabeza de lista de Geroa Bai, reconoció, tal y como avanzó en campaña, que corresponde a EH Bildu liderar el cambio en Iruñea por ser la fuerza más votada tras UPN. «El papel que asumimos y donde nos ha puesto la ciudadanía es el de facilitador del cambio en Iruñea. Somos consecuentes, lo dijimos y así lo vamos a hacer. Geroa Bai está comprometida y, por supuesto, vamos a apoyar el cambio que quiere la mayoría social de la ciudad», añadió.

Esparza: «Estoy preparado si tengo que liderar la oposición»

La sensación que se vivía ayer en la sede de UPN era la contraria a la que se respiraba en las de EH Bildu, Podemos y Geroa Bai. La formación que preside Yolanda Barcina reunió ayer a su Comité Ejecutivo para analizar los resultados. Barcina compareció con Enrique Maya y José Javier Esparza para oficializar la derrota de UPN.

El único recurso al pataleo que emplearon fue quejarse de que el PNV está exultante en Donostia porque ha expulsado a EH Bildu de la Alcaldía, «pero en Pamplona se la arrebatará a UPN para dársela a Bildu-Batasuna».

Maya y Esparza sacaron pecho diciendo que habían ganado las elecciones, pero al mismo tiempo tuvieron que reconocer que los pactos entre partidos les condenarán a la oposición. «Si hay que ir a la oposición, lo haremos. Estoy preparado para ser el líder de la oposición», proclamó Esparza.

La sensación de fracaso es de tal calibre en el seno de UPN que Esparza reconoció que ha rehusado mantener una ronda de partidos como representante de la lista más votada ante la evidencia de que Uxue Barkos empezará mañana mismo las conversaciones para formar el Gobierno del cambio. Se limitó a decir que había hablado por teléfono con María Chivite y que seguramente se reuniría con ella.

Esparza llegó a decir que en el Parlamento navarro hay 26 escaños independentistas frente a 24 constitucionalistas y se quejó de que les acusaran «de utilizar el discurso del miedo cuando alertábamos del pacto entre cuatro, que traerá inestabilidad y caos».M.D..

Declaraciones

«Ahora, lo que toca es trabajar para consolidar y hacer real el Gobierno del cambio, que debe ser integrador, capaz y sereno»

UXUE BARKOS

Geroa Bai

«Vamos a actuar con responsabilidad. La hipótesis principal de trabajo para el cambio pasa por un acuerdo cuando menos programático entre cuatro fuerzas»

ADOLFO ARAIZ

EH Bildu

«Podemos no va a frustrar el cambio. Será la asamblea ciudadana navarra la que decida»

LAURA PÉREZ

Podemos