«Es un mecanismo que se ha puesto en marcha en la resolución de conflictos a nivel mundial y se sigue poniendo en diferentes ámbitos», ha indicado Barrena.
La también portavoz Amaia Izko ha destacado que «solo así se podrá abrir un nuevo tiempo que asiente cimientos sólidos y no sobre heridas sin cerrar que impidan la normalización, la paz y la convivencia».
También ha expresado que el discurso de la «violencia única» puede servir para «justificar determinados posicionamientos o falta de ellos», pero ha subrayado que «aquí no ha habido una sola violencia ni un solo responsable».
«Esta cuestión tiene que ser abordada de una forma colectiva y, en este sentido, hay que hacer un ejercicio global para que se reconozca la verdad de todo lo que ha pasado durante estos últimos años y sigue pasando», ha insistido Izko. «Todas las víctimas merecen reconocimiento, justicia, verdad y reparación, incluidas las de la tortura», ha indicado.
Muerte de Mikel Castillo hace 25 años
La comparecencia había sido convocada con motivo del 25º aniversario de la muerte de Mikel Castillo. Este militante de ETA falleció en la calle Carmen de la Parte Vieja de Iruñea a consecuencia de un disparo recibido en una persecución por parte de un agente de la Policía española.
La versión oficial –«plagada de sombras, intereses y dudas» en opiniçon de Sortu– habló de «legítima defensa» del policía, pero diferentes testigos aseguraron que Castillo huía desarmado cuando fue tiroteado por la espalda. El agente fue juzgado por homicidio, absuelto y posteriormente condecorado.
Amaia Izko ha denunciado que se pretenda convertir «en un grave delito» el recuerdo a una persona fallecida en estas circunstancias.