Joakin Izagirre, Ramon Gaztelumendi, Xabier Iragorri y Miren Itziar Iñarra fueron juzgados el pasado 11 de noviembre en la Audiencia Nacional, acusados de «enaltecimiento del terrorismo», a raíz de la operación que tuvo lugar en junio de 2014 contra ‘Gudarien basoa’ de Aritxulegi. Ramon Sagarzazu también fue imputado, pero no fue juzgado al estar preso en el Estado francés.
Durante el juicio, los cuatro imputados explicaron que el acto de recuerdo se celebra todos los años en marzo desde el fallecimiento del histórico militante abertzale Telesforo Monzón. No negaron su presencia en los actos de recuerdo pero precisaron que se trata de actos privados en los que cada familiar planta un árbol en memoria de su allegado fallecido.
La Fiscalía pedía 18 meses de prisión para cada uno, pero la Audiencia Nacional les ha absuelto al entender que sus conductass no incurrieron en «enaltecimiento del terrorismo».
En su sentencia, el tribunal especial dice que no ha quedao acreditado que el acto de Aritxulegi «estuviera organizado por la organización terrorista ETA o por alguno de sus grupos satélites», ni ha quedado constatado que en el mismo se «efectuaran alabanzas del terrorismo de ETA o loas a las personas fallecidas pertenecientes al entorno de ETA a cuyos nombres están dedidcados los 239 árboles» plantados en ‘Gudarien basoa’.
La AN también critica las «inconcreciones de los funcionarios investigadores» –guardias civiles– y la «falta de solidez de sus apreciaciones», lo que hace que «no podamos considerar delictivas las conductas de los acusados».