Hay días que despiertan con malas noticias y el de ayer fue uno de ellos. El periodista y compañero de GARA Juan Carlos Elorza falleció poco antes de la medianoche del jueves a los 55 años de edad a consecuencia de un colapso multifuncional. Se encontraba ingresado en el Hospital de Donostia desde el mes de diciembre, donde fue intervenido de un tumor alojado en el cerebro. La operación se saldó con resultados alentadores pero la infección que atacó su organismo en dos tandas sucesivas se encargó de malograr la esperanza del final amable que esperaba su familia y este periódico, en el que, entre otras funciones, fue subdirector y responsable de Kirolak.

Vinculado durante la mayor parte de su trayectoria al periodismo deportivo, Juan Carlos Elorza destacó como un gran experto en balonmano, una especialidad que le hizo merecedor de diversos reconocimientos y que clubes y asociaciones dejaron ayer patente con numerosas muestras de condolencia llegadas a esta redacción. De su dominio y buen hacer periodístico quedan innumerables crónicas de hazañas y batallas de los clubes vascos, entre los que potenciaba, además, el seguimiento a los equipos femeninos.

Oñatiarra hasta la médula –era difícil ser más de Oñati que él–, nacido en 1960 –«año de buena cosecha» decía con sorna–, y licenciado en Periodismo por la Universidad de Leioa, inició sus pasos en el terreno de la comunicación en 1989 como corresponsal local del diario ‘‘Egin’’ en la edición comarcal Debaldea. Otros pasos habían dejado ya su huella en el terreno deportivo para entonces; los que había dado en esa década de los 80 como futbolista del Aloña Mendi, luego como pivote de balonmano en el mismo club y más tarde como entrenador. Todavía hoy era socio del Aloña Mendi, el club de sus amores, el balonmano seguía siendo una pasión que enlazó con el mejor periodismo que se ha hecho en ese campo en el país, y de su mente privilegiada para la organización quedan incontables ejemplos en las diferentes responsabilidades que ha asumido en su trayectoria .

Ya en 1990 combinaba las labores de la edición local con su trabajo los domingos en la sección de Deportes de ‘‘Egin’’. Dos años más tarde, en 1992, fue nombrado redactor jefe del diario, cargo que ocupó hasta julio de 1998, fecha de la clausura judicial del periódico.

Después vendría GARA y en 1999 Juan Carlos Elorza integró el equipo como subdirector hasta 2004, fecha en que volvió a responsabilizarse de la sección deportiva. En el intervalo que separa ambas publicaciones, sin embargo, ocupó el vacío "Euskadi Información", cabecera que salió a los kioscos tomando el relevo de ‘‘Egin’’ desde el primer día de su desaparición. Fue él, Juan Carlos Elorza, quien el mismo día del cierre y una vez decidido que un grupo de trabajadores daría forma de imagen y cuerpo de letra a un nuevo periódico, se entregó a una batalla de esas que parecían imposibles de ganar. No había empresa que se atreviera a imprimir los ejemplares. La situación era como para desanimar a cualquiera. Menos a Elorza. Su tenacidad le llevó a recorrer esa tarde toda Gipuzkoa y, finalmente, lo consiguió. Dio con una pequeña y antigua imprenta que descansaba desde hacía años, cobijada bajo mantas, en una lonja de la capital donostiarra. De ella salió el primer ejemplar de Euskadi Información con el titular "Egin egingo dugu" y, ya entrada la noche, entregó en mano en todas las emisoras de radio de Donostia un ejemplar del nuevo medio de comunicación que acaba de nacer al día siguiente del cierre. La acción tuvo un efecto multiplicador.

Como subdirector de GARA, Juan Carlos Elorza dejó sentada su enorme capacidad y energía para planificar y coordinar equipos, tarea en la que muchas veces aplicaba estrategias deportivas, y que le dio el apelativo de Schwarzkopf (referencia al general estadounidense) con el que fue bautizado en la redacción. De gran cultura y ávido lector de prensa, su versatilidad fue también una de sus grandes señas de identidad y durante unos años lideró la empresa de fotografía Argazki Press.

Rotundo en las formas, tremendamente humano en la cercanía, para el recuerdo quedan frases que sobrevuelan hoy esta redacción de GARA como aquella tan suya de «la ortografía no se decide por votación» con la que apremiaba a quien planteara globalmente una duda gramatical. Porque Elorza, además, resultaba ser un excelente profesor de periodismo para los recién llegados y también para quienes llevaban años de profesión. En lo que fue su despacho siempre tuvo junto a él un lema impreso como una leyenda. Hoy lo hemos buscado. Y allí seguía: «Que quien escribe sepa de qué habla, que le emocione. Si tú te lo crees, el lector se lo cree». Elorza siempre lo hizo así.

Matxalen Ziarsolo: «sabía de balonmano más que nosotras»

La noticia de la muerte de Juan Carlos Elorza causó conmoción ayer en clubes de balonmano, asociaciones de prensa y miembros del mundo deportivo, que hicieron llegar a la redacción de este diario su pesar por el fallecimiento del periodista oñatiarra.

Como muestra de reconocimiento, en los partidos de balonmano que se juegan hoy en Euskal Herria se guardará un minuto de silencio en su memoria.

La Federación de Clubes de Balonmano de Bizkaia y Gipuzkoa, el club Anaitasuna de Iruñea, el Colegio de Periodistas Vascos y la Asociación Vasca de Periodistas-Euskal Kazetarien Elkartea, medios de comunicación como Radio Marca, Onda Deportiva y numerosos compañeros de profesión sumaron una larga cadena de sentimientos de pesar ante la muerte del periodista.

Mención especial merece la nota que hizo pública el equipo Bera Bera. En ella, tras calificar de «mazazo» la muerte, indica que «a través de sus afinadas crónicas, Juan Carlos Elorza ha escrito la historia de este club, ha proporcionado innumerables datos que los propios protagonistas desconocían y su pérdida será añorada».

Su capitana, Matxalen Ziarsolo, manifestaba en Twitter que «sabía de balonmano más que nosotras y lo ha demostrado en sus crónicas reflejando lo que muchas veces hemos sentido en la pista». La responsable del Bera Bera, Tati Garmendia, manifestó que «echaremos de menos sus crónicas y sus charlas, muchas veces acaloradas y siempre apasionadas».

Muchas de las referencias personales que se lanzaban en esta red social ahondaban en el especial seguimiento y dedicación que Juan Carlos Elorza realizaba sobre los equipos femeninos de balonmano.

También el diputado de Cultura de Gipuzkoa, Denis Itxaso, mostró en la red social sus condolencias y destacaba la profesionalidad del periodista.

Trasladados desde el Hospital de Gipuzkoa, los restos de Juan Carlos Elorza permanecerán durante la jornada de hoy en el Tanatorio

Moyua de su localidad natal de Oñati y posteriormente será incinerado.M.A.