El Juzgado de Instrucción número 2 de Donostia archivó el mes pasado el caso de la emboscada de Pasaia 32 años después de la muerte de José María Izura, Pedro María Isart, Rafael Delas y Dionisio Aizpuru, integrantes de los Comandos Autonómos Anticapitalistas que fallecieron tras recibir en total más de un centenar de disparos de agentes policiales.
Dos de ellos, Isart y Aizpuru, eran vecinos de Azpeitia, y desde 2001 está personado en la causa como acusación. Por ello, ante la nueva situación, ha presentado un recurso y ha aprobado esta semana por unanimidad –EH Bildu y PNV– una moción en la que exige que no se cierre la investigación sin que se aclare lo sucedido. «Igaul que otros, tenemos derecho a saber la verdad», apunta el texto.
Pello Aizpuru, hermano de uno de los fallecidos, tomó la palabra para denunciar que «es muy cruel, después de 32 años, con los testimonios y los datos que hay, con 113 impactos de bala… Ahora que se habla tanto de paz y convivencia, nos sentimos marginados. Tenemos el respaldo del Ayuntamiento y el del pueblo, pero el de nadie más. Y esto también sucedió».