El director general del Grupo Irizar, José Manuel Orcasitas, acompañado de los máximos directivos de la cooperativa guipuzcoana, han informado en un encuentro con los medios de comunicación de los principales datos económicos del ejercicio 2015 y de sus retos de futuro, entre los que destaca la apuesta por los vehículos eléctricos íntegramente fabricados por su marca.

Irizar ha previsto una inversión de 75 millones de euros para levantar la nueva planta de Aduna, de los que 60 proceden de la cooperativa matriz y 15 de otras empresas del grupo.

La nueva nave, cuyo esqueleto ya es visible, ocupará 18.000 metros cuadrados y se espera que esté construida para finales de este mismo año.

En ella Irizar espera fabricar en el futuro dos autobuses de pasajeros 100% eléctricos y un vehículo industrial eléctrico al día, con toda la tecnología fabricada por la empresa.

En esta fábrica no solo se construirán autobuses, sino toda la tecnología necesaria y otros sistemas eléctricos relacionados con la electromovilidad.

Cierre de 2015

El Grupo Irizar cerró el 2015 con una facturación récord de 552 millones de euros, a la que ha contribuido especialmente el crecimiento del volumen de negocio de la planta de Ormaiztegi, la matriz del grupo, que se ha incrementado en un 30% en 2015.

Durante el pasado ejercicio Irizar abordó una de sus grandes apuestas estratégicas, la fabricación de autocares integrales dirigidos a los mercados europeo y estadounidense, donde ha logrado incrementar sus ventas.

El paso de empresa carrocera a la fabricación integral de autobuses permite a Irizar lograr «ingresos recurrentes» después de la venta, ya que también se encarga del mantenimiento de todos los componentes que incorpora el vehículo, tal y como ha explicado Orcasitas.

Como consecuencia de este crecimiento, en los dos últimos años Irizar ha incorporado a su factoría de Ormaiztegi a 142 personas, lo que significa un aumento de la plantilla de un 20%.

Esta fábrica supone el 46% de la facturación global del grupo, mientras que las plantas del exterior (Brasil, México, Sudáfrica y Marruecos) reducen su peso hasta el 34% del total y el resto de las compañías del grupo significan el 20%.

«Ha sido un gran año», ha dicho Orcasitas, quien ha destacado la «rápida reacción» y la capacidad de recuperación que el grupo mostró a partir de 2009, año en el que su facturación cayó considerablemente con motivo de la explosión de la crisis económica.

Respecto a 2016, Irizar contempla el ejercicio «con optimismo» y espera que, de nuevo, Ormaiztegi y México sigan siendo las plantas tractoras del grupo, que prevé nuevos crecimientos de ventas de autocares integrales para los mercados de Europa y Estados Unidos.

En México este año comenzarán a fabricarse también autobuses integrales dirigidos a aquel mercado, para lo que el grupo ha transferido tecnología y conocimiento a los profesionales del país americano.

Este año, además de seguir construyendo la planta de Aduna, el Grupo Irizar prevé lanzar sus primeros modelos híbridos –tiene ya uno 100% eléctrico–, los i3 e i4, además de un prototipo de autocar eléctrico articulado que se cargará en las paradas por un sistema similar al de las catenarias de los trenes.

Orcasitas ha señalado la intención de Irizar de seguir creciendo y generando riqueza en Gipuzkoa, motivo por el que la empresa «no ha tenido la tentación» de construir su nueva fábrica en el exterior, sino que ha apostado por Aduna para desarrollar su gran apuesta por los vehículos eléctricos.

Se trata de un mercado que «va a explotar» a medio plazo, ya que las grandes ciudades ya están diseñando y aprobando planes para contar con una flota de autocares 100% eléctricos para la movilidad de las zonas céntricas. «Queremos estar preparados y lo vamos a estar», ha añadido el director general de grupo cooperativo vasco.