Laboral Kutxa ha tirado por la borda sus opciones de aspirar al liderato de grupo en el Top 16 de la Euroliga al perder en la cancha del Brose Baskets por 89-69 para terminar en el segundo puesto, que le empareja con el Panathinaikos en cuartos de final.

El primer lugar será para el CSKA de Moscú que nada tiene en juego ya en su visita mañana a la cancha del Olympiacos.

Nunca ha estado en disposición de plantar cara el Baskonia, que se ha dejado llevar durante todo el duelo ante un Brose Baskets que ha jugado con más intensidad, velocidad y acierto en su despedida de la Euroliga.

No ha comenzó Laboral Kutxa a pleno rendimiento y para el minuto siete un parcial de 20-3 ha disparado el marcador 24-10 a favor de un Brose Baskets que se ha aferrado a sus remotas opciones de acceder a cuartos de final. Los alemanes han martilleado con un elevado acierto desde la línea de tres puntos, cinco canastas en siete intentos, y encontraron todas las facilidades del mundo para campar a sus anchas en la zona baskonista y capturar todos los rebotes ofensivos.

Se ha obcecado el juego gasteiztarra en nutrir de balones a Bourousis para tratar de anotar pero las buenas defensas sobre el griego le han desactivado y el Brose ha seguido destrozando al Baskonia, 38-17 minuto 13.

En los últimos siete minutos del primer tiempo ha cambiado el patrón de juego y se ha dedicado a lanzar triples el Baskonia como única vía de suturar la herida pero un postrero e inverosímil de Miller ha cerrado veinte minutos para el olvido, 45-28.

No ha habido amago de reacción baskonista tras el intermedio y han seguido deambulando sobre la cancha y ha estado sometido al descomunal acierto de Theis que, con diez puntos seguidos, de nuevo ha permitido al Brose llegar a su máxima renta, 56-35 minuto 25.

Con acciones individuales y una docena de puntos entre Bourousis y Blazic ha llegado a situarse el Baskonia a solo once de los alemanes, 63-52, al cierre del tercer acto.

Sin embargo, ha vuelto a apretar el Brose Baskets para abrir el cuarto con un 10-2 en tres minutos y poner de nuevo tierra de por medio hasta el 73-54 que ya ha sido la espoleta que ha terminado de sacar del partido al Baskonia.