La líder del Partido Nacional Escocés (SNP), Nicola Sturgeon, ha valorado como «histórica» la victoria de la formación soberanista en las elecciones al Parlamento de Holyrood y ha subrayado su intención de formar gobierno en minoría, después de haberse quedado a dos escaños de la mayoría absoluta.
En esta línea Sturgeon ha señalado que el SNP ha obtenido «un claro e inequívoco mandato» de los ciudadanos para gobernar y que, por lo tanto, no tratará de llegar a acuerdos formales para su investidura. Con todo, la premier escocesa aseguró que tenderá la mano al resto de formaciones «para encontrar terrenos comunes y construir consensos».
Así, ha señalado que «no hay intención» de buscar ningún «arreglo formal» con otras formaciones, pero al tener necesidad de apoyos externos buscará «un Ejecutivo «inclusivo».
Preguntada por la apuesta independentista, ha asegurado que su intención es «persuadir y no dividir». Por ello, y sin hacer una reclamación explícita, ha señalado que el SNP «defenderá siempre sus ideas con pasión, con paciencia y con respeto». Así, ha suvrayado que «siempre» respetarán «la opinión de la gente».
En su lugar, ha vuelto a hacer hincapié en los puntos principales de su programa. «La educación será la principal prioridad de mi mandato como ministra principal, y espero ser juzgada por ello».