«No solamente se acordó el fin de las confrontaciones, sino que también se definió un cronograma preciso para que las FARC dejen las armas para siempre. Esto significa ni más ni menos el fin de las FARC como grupo armado», ha detallado Santos desde La Habana, donde ha asistidp a la firma del acuerdo.
El presidente se ha dirigido al máximo líder de las FARC, Rodrigo Londoño Echeverri, a quien hizo entrega de un ‘balígrafo’, un bolígrafo construido con un proyectil. «Las balas escribieron nuestro pasado, la educación escribirá nuestro futuro», ha apuntado.
«Lograr este acuerdo nos llena de fe y esperanza», ha agregado el presidente, quien ha recordado que «los jóvenes y niños colombianos no han conocido un solo día sin la violencia del conflicto armado».
Con el acuerdo firmado hoy, ha destacado, «el fin de las hostilidades queda asegurado, y el camino para que los miembros de las FARC dejen las armas queda claramente definido». Santos ha aprovechado la ocasión para agradecer a las Naciones Unidas por la supervisión que se han comprometido a realizar al desarme de las FARC, así como a quienes acompañarán el proceso de concentración de los guerrilleros.
Asimismo, ha enfatizado que «todavía faltan temas importantes por acordar» para firmar la paz, y que en ese sentido han acordado con la guerrilla «evacuarlos lo más pronto posible».
Santos ha prcisado que una vez firmada la paz defenderá «con igual determinación el derecho de las FARC a expresarse y a que sigan su lucha política por las vías legales, así nunca estemos de acuerdo».