Miles de personas han respondido al llamamiento de los colectivos feministas de la ciudad para salir a plantar cara a la agresión sufrida por una joven de 19 años en la primera noche de los sanfermines. Entre ellos, han acudido el alcalde Joseba Asiron y la presidenta del Gobierno, Uxue Barkos, quienes sin embargo han preferido que sean las representantes del movimiento feminista las que leyeran el comunicado de repulsa.
Todos los accesos a la plaza se han bloqueado y la protesta ha partido las fiestas por la mitad, ya que la Plaza del Ayuntamiento es un sitio de paso muy transitado. Antes de las 21:00 horas no cabía nadie más y era imposible cruzarla. Los presentes han levantado las manos en símbolo de protesta y han coreado varios lemas. El principal ha sido "Erasorik ez erantzunik gabe" (Ninguna agresión sin respuesta). A diferencia de lo que ocurre durante el txupinazo, cuando únicamente se llena la plaza del Ayuntamiento, en esta ocasión se han llenado también todas las calles para llegar a la plaza.
Ha sido realmente conmovedor la respuesta que se ha vivido esta tarde. Mucha gente ha salido emocionada de la plaza, con la sensación de que algo bonito ha surgido del horror.
Cinco personas han sido detenidas por el incidente. Al parecer, cuatro de los presuntos agresores se habían ido a las vaquillas después de cometer el abuso contra la joven. Allí han sido detenidos gracias a la descripción que se ha facilitado a los policías forales. Posteriormente, se ha detenido a una quinta persona en un coche.