Basauri fue ayer de nuevo escenario de un desahucio y de la movilización vecinal para arropar a la afectada, una mujer de 51 años con una hija de 11 a su cargo, a quien se obligó a abandonar el que ha sido dos años su hogar por el impago del alquiler. Tras los momentos de tensión vividos frente al nº 55 de la calle Kareaga Goikoa, buena parte de los concentrados desde las 8.30 se desplazaron hasta la casa consistorial para tratar de reunirse con el alcalde, el jeltzale Andoni Busquet, al objeto de exponerle la grave situación y arrancarle un compromiso después de que, en varios comunicados, el Gobierno municipal mostrara su disposición a ayudar a esta familia «en la búsqueda de alternativas de vivienda y otros apoyos asistenciales».
Después de una larga espera, representantes de Baietz Basauri mantuvieron un encuentro con Busquet y el edil de Acción Social, Asier Iragorri, a los que tan solo arrancaron el compromiso de que hoy volverán a reunirse con la presencia de la mujer afectada para intentar buscarle un techo a ella y a su hija, además de otro tipo de ayuda o recurso que pueda necesitar. Así, la familia pasó la noche en la vivienda de unos vecinos gracias a su solidaridad, como la que les vienen prestando para superar la situación de precariedad absoluta que padecen.
Solidaridad vecinal
La misma solidaridad que sintieron desde primera hora de la mañana cuando decenas de basauriarras se reunieron frente al portal nº 55 de Kareaga Goikoa tras una pancarta con el lema ‘‘Etxegabetzerik ez! No más desahucios! Udaletxe arduraduna Ayuntamiento responsable”, de la plataforma Baietz Basauri.
En un primer momento hasta el lugar se desplazaron policías municipales y un agente judicial que, ante las protestas, se retiraron, no sin antes oír el emplazamiento de que se buscara una solución al caso de esta familia como paso previo a la ejecución del desahucio.
A instancia de la plataforma, la edil de EH Bildu Natalia Gardeazabal trató de contactar con responsables de los servicios sociales del Consistorio sin conseguir respuesta, tal y como informó. En torno a las 11.15, quienes sí acudieron fueron varias dotaciones de la Ertzaintza, que dieron cobertura a la ejecución del desahucio decretado por un Juzgado de Primera Instancia de Bilbo entre las protestas de las decenas de personas reunidas en la calle Kareaga Goikoa.
Arropada por varios vecinos, la mujer bajó a la calle entre lágrimas, rodeada por ertzainas que iban provistos de material antidisturbios y medios de comunicación, y allí fue recibida por gritos de ánimo de los concentrados, al tiempo que coreaban ‘‘PNV desahuciador’’.
La plataforma social viene reclamando desde hace varias jornadas que no se desvíe la atención del problema social que existe, que no es otro que el de una mujer y su hija en la calle. De ahí que «ante la realidad de un servicio de protección social a todas luces insuficiente e ineficaz», pidieran que el Ayuntamiento asuma su responsabilidad y haga que se pongan los medios para que esta familia encuentre «una reubicación en un hogar digno».