Hernando ha intervenido en nombre de su grupo en defensa de la abstención que va a permitir a Rajoy formar gobierno, pocas horas después de que el ex secretario general del PSOE Pedro Sánchez renunciara a su acta de diputado por considerar equivocado ese rumbo de su partido.
«Usted está en clara minoría y bajo una estrecha vigilancia», ha avisa Hernando a Rajoy en el debate previo a la segunda votación de su investidura, en el que ha reiterado que el PSOE hará «su más firme oposición».
Hernando, que no ha sido aplaudido por diputados críticos como César Luena, Margarita Robles o Susana Sumelzo, ha defendido que al PSOE no le gusta Rajoy ni sus políticas, pero ha explicado que sus diputados se van a abstener porque no quieren unas terceras elecciones y no quieren que «se deterioren más las instituciones», pero ha asegurado que a partir del lunes mismo van a hacerle una «estrecha vigilancia».
«En las últimas semanas y en los últimos días, usted ha podido fantasear con disfrutar de una oposición de gritos y chascarrillos, Twitter y camisetas, de textos legislativos que no presentaría ni un estudiante de primero de derecho y abandonos irresponsables del puesto de trabajo», ha apuntado, en clara referencia a Podemos.
Pero le ha avisado de que si su «sueño» ha sido tener en frente «una oposición que vende soluciones fáciles, mágicas, milagreras o fantasiosas, soluciones imposible», tiene que despertar y abandonar «toda esperanza».
Porque, ha remachado, el PP va tener «la oposición de las mujeres y los hombres del Partido Socialista», que van a actuar «con la sensatez y la valentía de quien aspira a construir una alternativa que merezca la confianza mayoritaria de los ciudadanos». Y ha asegurado que no le van a dar ni los «cien días de cortesía» que se asumen, porque no van a pasar por este «formalismo» y le van a «exigir responsabilidades» al Gobierno «desde el primer día».