Tras el entrenamiento en Tajonar, Nauzet ha comparecido en una rueda de prensa en la que afirmado que los rojillos hicieron en Bilbo «un gran partido», y ha añadido que el empate logrado fue un «punto muy trabajado» ante un «gran rival en un campo muy complicado».

Y ha añadido que en los primeros 45 minutos del partido frente al Athletic fueron cuando Osasuna, a su juicio, «posiblemente se ha encontrado mejor y más a gusto».

Cuestionado por si su buena actuación compensó los errores del anterior partido en El Sadar y frente al Betis, el portero ha indicado que la semana pasada fue «dura» y la sobrellevó como pudo.

«El día del Betis me tocó vivir el lado malo de nuestra profesión», ha incidido antes de reconocer que lo llevó «mal porque por un fallo tuyo el equipo pierde puntos, pero en otros momentos ayudamos a lograrlos».

Nauzet se ha referido también a la solidez defensiva de Osasuna, cuestionada en las últimas fechas, para apuntar que en la temporada pasada «era la faceta que mejor» llevaban y les faltaban «ocasiones de gol, y ahora es al revés», por lo que ha señalado que es «tarea de todo el equipo atacar y defender, y en eso estamos».

Ha apuntado, además, que son conscientes de que pueden «sacar muchos puntos en muchos campos» como lo han demostrado «contra el Eibar y contra el Athletic», por lo que ha considerado que se encuentran en una fase de crecimiento.

Preguntado por la actuación de Alex Berenguer, pretendido por el Atletic el pasado verano, ha admitido que ayer «destacó muchísimo», aunque «hay otros partidos que destacan otros compañeros».

El guardameta ha aludido igualmente al próximo encuentro en El Sadar contra el Alavés, este sábado, para subrayar que quieren «ganar» y que la afición «se vaya contenta».

«Sería perfecto» lograr la victoria frente al conjunto blanquiazul, ha dicho, aunque ha advertido de que «no valdría de nada» salir de los puestos de descenso durante una jornada, sino que «hay que seguir, seguir, seguir».

Ha tenido también unas palabras para sus compañeros lesionados, el delantero Oriol Riera y el centrocampista Didier Digard, a quienes ha lanzado un mensaje de ánimo después de comentar que, al producirse las dos bajas en el primer tiempo del encuentro, el partido se hizo «un poco cuesta arriba, pero el equipo lo llevó bien».