En concreto, se tratan de tres acusados de sendos delitos de atentado a agente de la autoridad, así como dos de ellos de dos delitos leves de usurpación de bienes inmuebles y de dos delitos leves de lesiones.

El Ministerio Público pide 15 meses de prisión y 7 de multa para cada uno de los dos acusados.
El fiscal sostiene en su escrito de conclusiones provisionales que los acusados, a una hora indeterminada pero anterior a las 12:43 del 8 de octubre, «en compañía de terceras personas, y a sabiendas de que el inmueble pertenecía a un tercero, ocuparon el edificio sito en Paseo de Sarasate 13 con ánimo de uso y disfrute del mismo con permanencia y estabilidad».

Ante la denuncia que por estos hechos presentó la propiedad del inmueble, Construcciones y Promociones Sarasate XXI, hasta el lugar se movilizaron diversos efectivos de la Policía Municipal con el propósito de desalojar el edificio.

Dos agentes, según la Fiscalía, consiguieron acceder al mismo y desbloquear una puerta de la segunda planta cerrada desde el interior y en una de cuyas estancias se encontraban los acusados.

Instados por los funcionarios a abandonar el lugar, los acusados se negaron, respondieron con gritos de «Iros vosotros que estáis en mi casa» y otras proclamas favorables a la ocupación, se amarraron a diversos elementos y arengaron a los congregados en la calle, asegura el fiscal.

Y subraya que pese a la resistencia que opuso, finalmente se consiguió liberar de sus amarres a uno de los procesados, momento en el que éste intentó huir del lugar causando a uno de los agentes lesiones por las que tardó siete días en curar.

Un intento de escapar que también protagonizó el segundo procesado cuando finalmente entre tres funcionarios consiguieron soltar el agarre al que se había amarrado, uno de los cuales también resultó lesionado y tardó diez días en recuperarse.

Para el ministerio público estos hechos constituyen dos delitos leves de usurpación de bien inmueble, dos de atentado para resistencia grave a la autoridad, y dos de lesiones leves, por los que pide para cada uno de los acusados, respectivamente, cinco meses de multa a 15 euros de cuota, 15 meses de prisión y otros dos meses de multa con igual cuota.

Además para uno de ellos reclama una indemnización de 210 euros por las lesiones que provocó al agente y para el otro la eleva a 300 euros por los daños que sufrió el segundo policía.