NAIZ
MADRID

Un juzgado de Madrid prohíbe de forma cautelar la circulación del autobús de Hazte Oír

El Juzgado de Instrucción número 42 de Madrid ha acordado como medida cautelar la prohibición de circulación del autobús desplegado por Hazte Oír hasta que no retire el mensaje contra la transexualidad. La organización ultracatólica ha anunciado que mantendrá la campaña y sacará el autobús «secuestrado» y al menos otro vehículo cubriendo los mensajes prohibidos por otros «muy llamativos» contra «la ideología de género».

El autobús transfóbico de Hazte Oír permanece inmovilizado en una nave de Coslada, en Madrid. (Pierre Philippe MARCOU/AFP)
El autobús transfóbico de Hazte Oír permanece inmovilizado en una nave de Coslada, en Madrid. (Pierre Philippe MARCOU/AFP)

En un oficio fechado ayer y citado por Europa Press, el juzgado acuerda la medida cautelar de prohibir circular al autobús de la campaña de la organización ultracatólica tras haber recibido el escrito de la Fiscalía de Madrid que solicitaba precisamente esa decisión. Contra la resolución cabe interponer recurso de reforma.

En su escrito, se decreta la prohibición de circular de este autobús, al entender que su mensaje «no se limita a exponer» el ideario del colectivo, sino que se dirige a personas con una identidad sexual «distinta» para lesionar su «dignidad».

El Ayuntamiento de Madrid ya procedió a la inmovilización del mencionado autobús que pretendía recorrer las calles de la ciudad con el mensaje «Los niños tienen pene. Las niñas tienen vulva. Que no te engañen. Si naces hombre, eres hombre. Si eres mujer, seguirás siéndolo».

El itinerario que había planeado la organización ultra también preveía el paso por las cuatro capitales de Hego Euskal Herria, lo que provocó un amplio rechazo tanto social como institucional.

Para decidir sobre la prohibición cautelar, el juzgado tomó declaración al presidente de Hazte Oír, Ignacio Arsuaga, que se opuso a la inmovilización del bus vinilado para la campaña.

Arsuaga argumentó que la campaña tiene como objetivo que las personas que tengan una ideología afín a la del colectivo puedan acceder a su web para leer una publicación editada por la asociación en las califican las leyes de protección de derechos del colectivo LGTBi como normativas de «adoctrinamiento sexual».

En su declaración, el presidente de Hazte Oír reconoce que su eslogan puede ser «provocador» pero niega que conlleve un «rechazo» a la transexualidad o a la homosexualidad. A su vez, expone que la iniciativa es un ejercicio de la «libertad de expresión».

El juzgado expone en su resolución judicial que «del tenor literal de la publicidad no se infiere racionalmente que se esté públicamente fomentado, promoviendo o incitando directa o indirectamente al odio, hostilidad, discriminación o violencia contra un grupo por razón de orientación o identidad sexual de sus componentes».

No obstante, el magistrado sí considera que la campaña puede suponer un «menosprecio» a este colectivo.

«A este respecto, cabe destacar que dicha afirmación, expositiva del ideario de la asociación Hazte Oír, no se limita a exponer el ideario, que puede tener respecto a la sexualidad, sino que extralimitándose de dicho ideario, parece dirigirse a las personas con una orientación sexual distinta, negándosela, lesionando de esta manera su dignidad», recoge la resolución.

Por ello, decreta que las expresiones concretas recogidas en la campaña suponen «un acto de menosprecio a las personas con orientación sexual distinta a la heretosexualidad, incluidas en el apartado segundo del artículo 510 del Código Penal».

La campaña sigue con otro mensaje

Tras conocerse la decisión del juez, el presidente de Hazte Oír, Ignacio Arsuaga, ha lamentado que «la Inquisición gay haya impuesto su dictadura», pero ha anunciado que su autobús «secuestrado» y al menos otro vehículo tomarán las calles cubriendo los mensajes prohibidos por el juez por otros «muy llamativos» contra la «ideología de género».

La asociación ultracatólica, que recurrirá la decisión, ha decidido cubrir con un vinilo los mensajes que ha prohibido el magistrado y pondrán otros mensajes que aún están decidiendo y confían en que, a partir de mañana, pueda volver a estar circulando el autobús. Además, se unirá otro vehículo una vez se resuelva el recurso que piensa interponer contra el auto del juez de madrid.

La organización presentará, además, una querella por injurias y calumnias contra todo aquel que estos días ha atentado contra su «libertad de expresión», entre ellos el Ayuntamiento de Madrid.