«La Justicia pone a cada uno en su sitio». Pablo Casado, vicesecretario de Comunicación del PP, ha celebrado la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) en la que se condena a Artur Mas, Joana Ortega e Irene Rigau por la consulta del 9N. La formación del presidente español, Mariano Rajoy, ha sido una de las que más ha aplaudido el fallo. Junto a ellos, PSOE y Ciudadanos, quienes mantienen la unanimidad contra la consulta en Catalunya. Únicamente Podemos ha roto con el mensaje unívoco, criticando que alguien sea perseguido por «poner urnas».
«No se juzga a nadie por sus ideas políticas sino por incumplir la ley», ha asegurado Casado en una rueda de prensa en Génova. «Respetamos las decisiones judiciales, con absoluta moderación y prudencia, pero sí reivindicamos que en España las instituciones democráticas funcionan, la justicia se acaba abriendo paso y todos los españoles, especialmente los catalanes, pueden tener la certeza de que no va a existir la impunidad», ha reiterado.
En la misma línea, Antonio Hernando, portavoz parlamentario del PSOE, se ha aferrado a la fórmula del «respeto-por-las-decisiones-judiciales» y ha insistido en la defensa del «cumplimiento de la ley». Teniendo en cuenta las tensiones existentes en Ferraz una de las preocupaciones era saber si el PSC mantendría la disciplina de discurso. Así ha sido. «No respetar al Tribunal Constitucional acarrea sus consecuencias», ha sentenciado Salvador Illa, secretario de Organización de la formación en Catalunya.
Compitiendo en unionismo, Ciudadanos ha celebrado la sentencia argumentando que «los políticos no estamos por encima de la ley». Así lo ha afirmado su secretario general, José Manuel Villegas, que ha ubicado el fallo en el ámbito jurídico y no en términos de reclamación democrática del Principat.
Los únicos que han roto el consenso punitivo han sido los portavoces de Podemos. Pablo Iglesias, su secretario general, ha calificado de «vergüenza» la sentencia de Mas «por poner urnas». No obstante, tampoco ha dejado pasar la oportunidad de dejar un recadito al expresident. «Artur Mas es el heredero del pujolismo; una de las peores expresiones de la Trama, pero que le condenen por poner urnas es una vergüenza», ha asegurado.