En la misiva, firmada por el alcalde Eneko Goia, se destaca que «desde la Comisión de Derechos Humanos de este Ayuntamiento entendemos que, llegados a este punto, sería conveniente tratar de buscar una solución lo más rápida posible a esta situación, siempre pensando en el beneficio de la niña y en que el traslado a San Sebastián, junto a su madre, sería la mejor respuesta que en este momento podríamos ofrecerle de cara a su completo restablecimiento».

La carta recuerda que «tras la brutal agresión sufrida por la niña en el mes de enero, se han ido adoptando que han posibilitado que la niña pueda estar continuamente acompañada por su madre. Decisiones que, atendiendo exclusivamente a criterios de humanidad, son necesarias para lograr el pleno restablecimiento de la niña y que a nuestro modo de ver son acertadas».

Junto a ello, destaca que «todavía no ha sido posible el traslado de la pequeña a nuestra ciudad, traslado que sería desable al objeto de que pueda ser escolarizada en el centro educativo que le corresponde y pueda desarrollar una vida de lo más normal posible». En este sentido, recuerda que madre e hija se encuentran en la Fundación Padre Garralda de Madrid «a la espera de que Sara Majarenas cumpla la condena que le queda pendiente».

La Comisión de Derechos Humanos del Ayuntamiento de Donostia aprobó el 11 de abril dirigirse al juez Casto para solicitarle el traslado de Majarenas y su hija fueran trasladadas a la capital guipuzcoana. La misiva se envió el día 26. En la reunión de la comisión de hoy, Goia ha propuesto esperar a la respuesta del juez, mientras que EH Bildu ha reclamado que se insista en la demanda.