Gracias a los cinco escaños del PNV, Mariano Rajoy podrá hoy respirar tranquilo, salvar la primera «bola de partido» de los presupuestos y –como reconoció ayer el presidente del EBB, Andoni Ortuzar– «dar una buena imagen ante Europa, una imagen de normalidad». Gracias a los cinco escaños del PNV, y si nadie se equivoca en ninguna de las 21 votaciones previstas, las siete enmiendas a la totalidad presentadas irán decayendo, una a una, por un empate a 175 votos. Gracias a los cinco escaños del PNV, un PP agobiado por los casos de corrupción que le inundan por todos lados podrá tomarse un respiro.

¿Y qué ha conseguido el PNV a cambio de esos cinco escaños salvadores? Un acuerdo sobre el Cupo, importante pero que no llega a lo que estaba demandando. Un pacto que, formalmente, debía haberse separado de las negociaciones presupuestarias –según una y otra vez defendió Lakua– y que finalmente se presenta como baza.

Y ha conseguido también otro calendario sobre el TAV con otra fecha límite para la que se promete que estará acabado, y otro compromiso para reducir la tarifa eléctrica de la media tensión que afecta a muchas empresas.

«Y vasca», 2010-2016-2023

El presidente del EBB, Andoni Ortuzar, asumió en la tarde de ayer en primera persona la defensa «sin complejos» del pacto con el PP, que calificó de «un buen acuerdo para el país». Aseguró que la negociación había sido dura y que pasó la tarde del martes en La Moncloa. La firma se cerró ayer al mediodía.

Entre los 36 puntos del acuerdo, Ortuzar destacó tres. El primero, el compromiso con la «Y vasca», que ,con un plan de inversiones plurianual de 3380 millones, permitirá que el TAV sea una realidad en 2023, con los accesos soterrados a Bilbao y Gasteiz y conexión directa con el TGV francés en 2025.

Cabe recordar que el impulso a la «Y vasca» ya fue motivo de apoyo del PNV a los PGE de 2006, cuando con 4000 millones se hablaba de acabar la obra en 2010. Después, también justificó el voto a las Cuentas de 2011, arrancando al Ministerio de Fomento el mantenimiento del ritmo de inversiones en todos los tramos, «para garantizar el cumplimiento de los plazos de ejecución» que entonces preveían acabar las obras en 2016

La rebaja eléctrica ya se pactó

Ortuzar destacó también el acuerdo alcanzado para que en 2018 se reduzcan las tarifas eléctricas en la línea de media tensión, lo que supondrá importantes ahorros para las empresas vascas, que el presidente del EBB cifró en 50 millones anuales.

Cabe recordar que en 2013 el PNV apoyó la Ley del Sector Eléctrico del PP porque –según dijo el entonces diputado y hoy consejero de Hacienda, Pedro Azpiazu– habían pactado con el Ministerio de Industria que la tarifa se reduciría en un 30% en 2014 y en un 20% adicional en 2015, lo que rebajaban a la mitad los sobrecostes para la industria vasca, que se estimaban en 100 millones. Es decir, en 2013 el PNV ya dijo haber conseguido esa rebaja anual de 50 millones.

Un tercer acuerdo puesto en valor por Andoni Ortuzar fue el de que la Ertzaintza ingresará en ámbitos de decisión europeos como el CITCO (Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado), podrá hacer persecuciones «en caliente» más allá de la muga y realizar las OPEs que necesite.

Andoni Ortuzar se mostró en todo momento sonriente y satisfecho por el pacto alcanzado «por el bien de Euskadi».

Duras críticas de la izquierda al «mercadeo» de los jeltzales «con el partido de la corrupción»

Una vez confirmado el apoyo de los jeltzales al Gobierno de Mariano Rajoy, arreciaron las críticas desde los partidos de izquierda. La portavoz de EH Bildu en el Congreso, Marian Beitialarrangoitia, acusó al PNV de permitir que el PP continúe con sus políticas «corruptas». Unidos Podemos les acusó de actuar «a golpe de chequera».

En los pasillos de la Cámara Baja, Marian Beitialarrangoitia sostuvo que el pacto del PNV con el PP «viene a apuntalar y fortalecer al partido más corrupto de Europa» y «le va a permitir seguir con las políticas corruptas, antidemocráticas y antisociales que ha venido implementando hasta ahora».

La portavoz de EH Bildu aseguró que la aprobación de estos PGE «en modo alguno» va a suponer «ningún beneficio» para la ciudadanía vasca, y añadió que tampoco acarreará nada positivo para las clases trabajadores españolas.

También acusó al ministro español de Hacienda, Cristóbal Montoro, de «falsear la realidad» en el discurso de presentación de las Cuentas y de continuar «empeñado en gobernar para las grandes empresas y no para la mayoría social».

El portavoz parlamentario de Economía de Podemos, Alberto Montero, reprochó al PNV que se haya dejado «comprar» por el Gobierno de Rajoy. «La plurinacionalidad la entienden a golpe de chequera», les espetó a los jeltzales.

Desde Compromís acusaron al Gobierno español de «comprar con nuestro dinero los votos de los nacionalistas vascos necesarios para sacar adelante unos presupuestos que vuelven a humillar a los valencianos». Se mostraron muy enfadados tanto por el acuerdo sobre el Cupo que engrasó el apoyo del PNV a los PGE como por la aplicación que se está haciendo del Concierto Económico.

Por otra parte, el portavoz de UPN en el Congreso, Íñigo Alli, defendió su apoyo a las Cuentas del PP por el bien de la «estabilidad de España» y por que son unos presupuestos positivos para Nafarroa en los que UPN no intenta «mercadear» hasta el último momento. Sin citar al PNV, Alli quiso dejar claro que ese no es el «estilo» de UPN, que, garantizó, va a «hacer valer» sus dos escaños, «decisivos», para la aprobación de los Presupuestos como primer partido de la Comunidad Foral.

En una rueda de prensa tras la primera sesión del debate, Alli destacó el acuerdo para «reimpulsar» dos infraestructuras «imprescindibles» para su comunidad, como el Canal de Navarra y el TAV.GARA