Integrantes de la red ciudadana Sare han abierto la marcha con el lema principal de la convocatoria, la reclamación de que los presos gravemente enfermos sean excarcelados a la mayor brevedad. A la cabeza de la manifestación han marchado también quienes viven en primera persona la preocupación por la evolución que puede tener en prisión la delicada salud de sus familiares presos, quienes han mostrado en alto el símbolo de la campaña ‘Yo denuncio’ de Sare junto a los nombres de los reclusos aquejados por dolencias graves, como José Ramon López Abetxuko, Txus Martin, Ibon Fernandez Iradi, Ibon Iparragirre o Manu Azkarate, entre otros. La consigna ‘euskal preso gaixo larriak etxera’ no ha dejado de corearse con fuerza al paso de la marcha por el centro de gasteiz.
Antes de iniciarse el recorrido, el portavoz de Sare Josefa Azkarraga ha puesto en valor el liderazgo de la sociedad civil, demostrado recientemente en Ipar Euska Herria y ha remarcado la importancia de que sea la sociedad quien lidere también la resolución del conflicto, en lo que se refiere a la cuestión de los presos. Azkarraga ha denunciado que el Gobierno español además de incumplir la ley actúa desde el «revanchismo» en referencia a las decisión de no permitir más excarcelación por enfermedad que la que sitúa al recluso en las últimas semanas de vida.
Al final de la marcha, a la que ha asistido una amplia representación del grupo parlamentario de EH Bildu en la Cámara de Gasteiz, una abarrotada Plaza de los Fueros ha asistido al mensaje final que ha sido leído en euskara y castellano por el periosita Xabier Euzkitze y la profesora de la UPV-EHU Estitxu Garai. Interrumpidos en varias ocasiones por los aplausos, Euzkitze y Garai han exigido «a los gobiernos de Madrid y París y también a los órganos judiciales de esos países justicia y humanidad para los presos gravemente enfermos».
Han denunciado que ambos ejecutivos están incumpliendo su propia legislación, así como reglas que como estados miembros de la UE están obligados a respetar. Han remarcado que «no existe ley ni reglamento, ni norma alguna que indique que cualquier persona, por el hecho de estar privada de libertad debe ser también privada de su derecho a la salud y a un trato digno», al tiempo que han denunciado «la actitud vengativa» de Madrid «con la aquiescencia de una parte de su justicia, que actúa de manera obediente y sumisa».
«Denunciamos al Gobierno español que chantajea y mercadea políticamente con la salud y la vida» de las personas presas, han manifestado, al denunciar «las últimas directrices de este gobierno, manifestando que solo pondrá en libertad a las y los presos gravemente enfermos si hay seguridad de que van a morir pronto».
«Deben ser puestas en libertad de manera inmediata, no para que mueran, sino precisamente para que , si es posible, recuperen la salud, tan deteriorada por años y años de privación de libertad».
Han denunciado, asimismo, a quienes desde el ámbito de la política, la comunicación o la justicia… miran hacia otro lado» y han reclamado a la sociedad vasca «que se mantenga alerta» y «que no permita que su silencio sea utilizado como apoyo para continuar igual».