El suceso se ha producido a las 9.55, en la N-240-A a la altura de Eritze, y hasta el lugar se han desplazado dos patrullas de tráfico y posteriormente otra de atestados, donde han certificado la muerte de un ciclista como consecuencia de un atropello.

El fallecido es un vecino de Zizur de 55 años, que circulaba en paralelo con otro ciclista en sentido Gasteiz. Según los primeros datos y manifestaciones de testigos, en un momento dado habría invadido la calzada, siendo arrollado por un vehículo que circulaba en la misma dirección.

El conductor del turismo, un vecino de Iruñea, ha dado negativo en las pruebas de alcoholemia y drogas.

Dos fallecidos más por causas naturales

Además, la jornada se ha saldado con dos fallecidos más en las carreteras navarras, estos por causas naturales. Uno de ellos, de 56 años, ha fallecido a media mañana en Lodosa, mientras circulaba por un camino rural.

Según ha informado la Policía Foral, se ha decretado «muerte judicial» al no establecerse la causa de la muerte, por lo que se bederá esperar a la autopsia para determinar lo que ha sucedido. «En principio, la inspección ocular no ha detectado nada raro», se añade en la nota.

El tercer fallecimiento se ha producido en Urbasa, en donde un hombre ha tenido que ser asistido en la NA-7183 cuando se encontraba en parada respiratoria. Aunque el ciclista ha sido trasladado a un centro hospitalario, no ha sido posible salvar su vida.

Los sucesos se producen después de que el pasado domingo otro ciclista, vecino de Villatuerta de 45 años, perdiera la vida en Lizarra al ser embestido en una rotonda y golpearse la cabeza contra el bordillo.