Convocados por organismos sociales y sindicaes que promueven la la Carta de los Derechos Sociales, perceptores de la RGI se ha concentrado ante la oficina de Lanbide ubicada en la calle Mazarredo de Bilbo.

En la movilización han protestado contra el agravamiento de las situaciones de pobreza de las familias perceptoras de la RGI tras la reforma promovida por el Gobierno de Gasteiz.

En declaraciones a Europa Press, el portavoz Gorka García ha subrayado que «la mal llamada reforma de la RGI», en realidad, «supone cambiarla de raíz». En este sentido, ha señalado que va a modificarla «por completo» el hecho de considerar a las personas que cohabitan o pagan un alquiler conjunto como unidades familiares, «cuando en muchos casos el único recurso para salir adelante para una persona sin recursos es compartir un alquiler, y más en Euskadi, una de las Comunidades con alquileres más altos».

A juicio de García, esta modificación afecta a una «amplia mayoría» de las personas que acceden a la RGI y supone considerarlas una familia «cuando no hay ni consanguinidad, ni parentesco, ni un papel firmado que garantice que la ayuda llegue a todas las personas que comparten ese piso». Por eso, ha considerado que hay una «intención manifiesta de acabar con las ayudas que se entregan a una gran parte de las personas que las solicitan».