Sobre el papel, los Mossos tienen ya la orden de perseguir cualquier actuación relativa a los preparativos del 1 de octubre, tal y como requirió ayer por la mañana el fiscal general de Catalunya, José María Romero de Tejada, al mayor de la policía catalana, Josep Lluís Trapero, que ayer por la tarde pasó el encargo a la Comisaría General de Información.
Trapero firmó una circular para poner en conocimiento del cuerpo policial las órdenes de la Fiscalía para requisar urnas, papeletas y cualquier material relacionado con el referéndum. La orden también fue trasladada a la Guardia Civil y a la Policía española.
La circular está dirigida a todo el cuerpo, pero indica expresamente que la Comisaría General de Información es la encargada de centralizar los atestados que se envíen a la Fiscalía. Para evitar «posibles duplicidades», apunta la circular.
De esta manera, Trapero sigue de momento las indicaciones de la Fiscalía y cumple con el procedimiento formal de trasladar sus órdenes. La gran incógnita, sobre la que conviene no precipitarse, es ver si esta orden se traduce ahora en acciones concretas de los Mossos.