En rueda de prensa en la sede de la Delegación, ha destacado que los Mossos tenían la obligación de evitar que se abrieran los colegios electorales, pero «se ha impuesto la línea política por encima de la profesional, poniendo en riesgo el prestigio de un cuerpo policial».
Millo ha pedido comprensión a los ciudadanos ante la intervención policial porque, según ha dicho, «el objetivo no son las personas, sino el material electoral» que hay dentro de los colegios.
2-Estas son las primeras urnas y papeletas incautadas por @policia, en Barcelona. Los agentes continúan despliegue en Cataluña#EstamosporTI pic.twitter.com/V6gzwz1XfX
— Ministerio Interior (@interiorgob) 1 de octubre de 2017
Preguntado por el alcance de la operación policial, ha dicho que dará información detallada en una nueva comparecencia a las 12.00.
Millo ha aseguradi que impedir la votación es la obligación de los cuerpos policiales, con el argumento de que «debemos velar por la seguridad de todos los catalanes», antes de criticar «la irresponsabilidad descomunal de poner en riesgo a niños y ancianos» ante los colegios electorales.
El delegado gubernativo ha aseverado que el referéndum es «una farsa» porque «no tienen nada para montar una votación mínimamente seria».