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Los alumnos de la Escuela Taller de Cantería rehabilitarán espacios de la Ciudadela

La Escuela Taller de Cantería ha comenzado su periodo de obra social en beneficio de la ciudad y su primer trabajo es en la Ciudadela de Iruñea. Ya está todo preparado para acometer la restauración del cuarto de los siete patios de las casamatas de la fortificación; concretamente la intervención actual es el único patio de los restos del Baluarte de la Victoria.

Zona de la Ciudadela donde intervendrán los alumnos de la Escuela Taller de Cantería. (AYUNTAMIENTO DE IRUÑEA)
Zona de la Ciudadela donde intervendrán los alumnos de la Escuela Taller de Cantería. (AYUNTAMIENTO DE IRUÑEA)

Según señala el Consistorio en una nota, los 15 alumnos de esta iniciativa de formación, cofinanciada por el Servicio Navarro de Empleo, irán pasando en turnos rotatorios de siete personas para desbrozar vegetación en los 280 m2 de patio y en la parte superior del espacio o los taludes aledaños, para después retirar tocones.

Una vez realizada esa labor, podrán empezar a limpiar 525 m2 de lienzo de muralla y a tratar los elementos de piedra, un trabajo que realizarán siempre bajo la supervisión de sus monitores y con el asesoramiento del arquitecto municipal responsable. Además está previsto intervenir en el túnel de salida de la casamata que se dispone al fondo del patio.

Hay siete patios bajos en la Ciudadela, tres que se han mantenido en un estado de conservación adecuado y cuatro en los que se ha tenido que intervenir, el último de todos el del Baluarte de la Victoria. De ellos tres tienen salida (incluyendo el que está en ejecución), es decir mantienen puertas en sus extremos. Pese a que dos de los patios durante mucho tiempo estuvieron en uso, hoy sólo se visita uno y siempre dentro de los recorridos guiados que organiza el Consistorio. Lo previsto es que la restauración del patio bajo del Baluarte de la Victoria finalice al mismo tiempo que la propia escuela.

Labrar piedra para un monumento histórico-artístico
En un principio lo proyectado es que el alumnado se encargue de picar las juntas entre piedras que no se encuentren en buen estado y, posteriormente, de rejuntar los sillares con mortero de cal y arena para que quede una superficie uniforme, sin grietas ni fisuras.

Por la revisión inicial, los especialistas consideran probable que en la zona superior de la muralla se hayan movido, o incluso fracturado, los sillares de piedra que forman la coronación del muro. Para ello los alumnos de la Escuela Taller de Cantería se encargarán de preparar sillares que los sustituyan.

En esos casos se suele usa material retirado de otras edificaciones y que guarda el propio Ayuntamiento o, si es necesario, comprar piedras de similares características. Los alumnos, asimismo, en las instalaciones de Landaben se encargarán de hacer labor de labra para homologar los nuevos elementos a los que subsisten, ya que este remate tiene forma curva que habrá que reproducir en los sillares que se aporten en estas obras.

También está previsto que se haga una limpieza superficial de los paramentos y una intervención de eliminación de pintadas con chorros de agua a presión controlada. Por otra parte, aprovechando los trabajos de restauración, se dejarán preparados los elementos para poder actualizar el sistema de alumbrado o garantizar el drenaje.

El proyecto de intervención prevé la colocación de un pavimento de canto rodado en el túnel que permite acceder a la casamata contigua al patio, un pasaje de poco más de tres metros de largo y con pendiente, que acaba en un elemento de rejería.