Así lo ha anunciado en rueda de prensa el consejero de Salud, Fernando Domínguez, acompañado por el director asistencial del CHN, Jesús Berjón, la subdirectora de Cuidados de Hospitalización y Urgentes, Marta Ancín, y la jefa de la sección de hospitalización domiciliaria, María Ruiz.

Domínguez ha recordado que ésta es la cuarta extensión que se lleva a cabo en esta legislatura. Se ha pasado de atender a una población de 300.000 habitantes y disponer de 20 camas en 2015, a contar con 96 camas y una cobertura de 480.000 personas en 2017.

Este servicio se ha potenciado mediante la incorporación de siete profesionales de Medicina y 16 de Enfermería, además de diez vehículos para desplazamientos, lo que ha permitido activar un nuevo equipo con capacidad para ocho plazas que prestará asistencia a los 20.000 habitantes de las zonas básicas de salud de Zangoza, Agoitz, Aurtzberri, Zaraitzu e Izaba.

El consejero, que ha apostado por esta modalidad porque «aporta indudables ventajas clínicas», ha asegurado que el tratamiento y la convalecencia del paciente se realizan en un entorno «conocido y más cómodo» y en compañía de la familia, «que se libera de la carga de los desplazamientos y las noches en hospitales».

Además, ha asegurado que se evitan posibles infecciones adquiridas en los centros hospitalarios, la recuperación funcional es más rápida y se consigue un ahorro de recursos sanitarios del 40 % respecto a una cama de hospital convencional.

En 2015, ha comentado Berjón, la hospitalización a domicilio atendía únicamente un área de unos diez kilómetros en torno al centro de Iruñea, un radio que se ha ido aumentando hasta los 25 kilómetros, mas las zonas rurales de Tafalla y las áreas noroeste y este de Nafarroa.

La actividad se ha sextuplicado en los últimos cinco años, al pasar de los más de 600 pacientes atendidos durante los años 2012, 2013 y 2014, a los 903 de 2015, los 1.700 en 2016 y los 4.000 con los que se prevé cerrar este año.

En caso de necesidad, está prevista la posibilidad de abrir más equipos, lo que evitaría la saturación de las camas del hospital.

A esta estructura del área de Iruñea se le suman las existentes para las zonas de Tutera, cuyas diez camas se ampliarán próximamente, y las de Lizarra, cuyas 14 plazas se vieron ampliadas en el mes de septiembre.

El paciente que opta por este modelo debe aceptar voluntariamente el ingreso, vivir en el área de cobertura de servicio y convivir con una persona con plenas capacidades y disponible para atenderle.

Por su parte, el equipo de hospitalización a domicilio elaborará un seguimiento personalizado para cada paciente y lo visitará periódicamente, además de realizar en el domicilio las pruebas diagnósticas y los procedimientos terapéuticos necesarios. Cada uno de estos equipos, formado por un profesional de Medicina y dos de Enfermería, atiende a un total de doce camas.

En los dos últimos años, en torno al 50 % de los pacientes atendidos en esta modalidad han sido derivados desde los servicios médicos del CHN, mientras que un 15 % han procedido de las plantas de hospitalización quirúrgicas, otro 15 % provenía del servicio de urgencias y otro 15 % ingresaba directamente a petición de su médico de Atención Primaria.