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Equipos de postín ya en serios apuros

CSKA de Moscú, Sporting de Portugal, Atlético de Madrid o Celtic de Glasgow están obligados a ganar para no quedar apeados a las primeras de cambio.

El primer día de la cuarta jornada de la Liga de Campeones deparará partidos que, a falta de dos por jugar, pueden apear de la competición a las primeras de cambio a varios equipos de postín como CSKA de Moscú o Atlético de Madrid, de la misma forma que otros, más potentes, como Barcelona, PSG, Manchester United o Chelsea puede dejar sellada su clasificación.

Uno de los que llega con el agua al cuello es el Atlético, a quien dos empates y una derrota le han puesto contra las cuerdas en el grupo C. Afronta tres finales, la primera hoy con el Qarabag de Azerbayán, al que recibe en el Wanda Metropolitano obligado a ganar para depender de sí mismo. Sin embargo, el equipo azerí no ha perdido todas las opciones de pasar, aunque con la tercera plaza que da acceso a Europa League se daría por satisfecho.

En este grupo la Roma recibe a un Chelsea que si gana estará en octavos de final y metería a los italianos en problemas.

Mourinho lo tiene bien

En el grupo A, el Manchester United, que ha ganado sus tres partidos, recibe en Old Trafford a un Benfica que cuenta encuentros por derrotas. Parece complicado que el equipo de Mourinho se deje sorprender, aunque, como siempre, las aguas andan revueltas para el portugués toda vez que los críticos al pobre juego de su equipo siguen creciendo y el pasado sábado tuvo un feo gesto hacia ellos mandándoles callar.

En este grupo el duelo interesante es el que enfrenta al Basilea con el CSKA en lucha por el segundo puesto. El equipo suizo está resultando una de las revelaciones de la fase de grupos de la Champions. Una victoria en su casa, si también gana el Manchester, les mete en la siguiente ronda y deja fuera a los rusos.

El Bayern tendrá que sudar

En el grupo B, el PSG no debe tener problemas para ganar al Anderlecht en París, aunque para una clasificación matemática necesita ganar o empatar y que el Celtic empate o pierda, respectivamente, ante el Bayern de Münich. El equipo escocés, tradicionalmente fuerte en casa, recibe en Glasgow al alemán y solo le vale la victoria, aunque será un objetivo muy complicado visto el estado de forma del conjunto muniqués desde que lo ha cogido Jupp Heynckes quien lo ha puesto de líder de la Bundesliga tras recortar 8 puntos al Borussia de Dortmund.

En cuanto al Anderlecht, que ha perdido todos los partidos, solo un milagro le sacaría del pozo de la última plaza.

Atractivo Sporting-Juventus

Finalmente, en el grupo D, el compromiso atractivo es el que enfrentará en Lisboa a Sporting de Portugal y Juventus. El equipo portugués está obligado a ganar a quien es su rival directo, porque una derrota con los de Massimiliano Allegri y una victoria del Barcelona en Grecia les dejaría fuera de octavos de final. Por su parte, los de Turín se clasifican si ganan y también lo hacen los de Valverde.

El técnico vasco, que regresa a la que fuera su casa durante dos temporadas y media, no podrá contar con Iniesta, lesionado, ni con Piqué, sancionado. Los griegos saldrán a la desesperada buscando opciones para alcanzar el tercer puesto y olvidar el sinsabor de la dolorosa derrota por 1-0 en el derbi ateniense contra Panathinakos.

 

Emery ¿entrenador o apagafuegos?

El PSG, que esta noche recibe al equipo más flojo del Grupo B, le van las cosas viento en popa a nivel de resultados. Lidera con solvencia tanto la liguilla de Champions como la Ligue 1 francesa, en la que en once jornadas ha ganado nueve partidos y solo ha cedido dos empates.

Son datos que deberían llevar un poco de paz al espíritu de Unai Emery, tras la discreta temporada pasada en la que se daba por sentado que sería cesado y en la que solo mantuvo el puesto por capricho de dueño del PSG, el multimillonario qatarí Nasser Al-Khelaifi, el mismo que le ha traido este año a Neymar y Mbappé.

Sin embargo, la pléyade de estrellas y, en particular, el brasileño le han traido un sinfín de problemas de convivencia. La última a la que tuvo que salir al paso ayer fue para desmentir que Neymar se aburra con sus métodos de trabajo. «Presta atención a la metodología y está atento a todas las sesiones de vídeos, incluso en primera fila», tuvo que decir. GARA