Tras una reunión celebrada hoy, el PDeCAT de Carles Puigdemont ha oficializado la propuesta de una «lista única de país» que responda al momento actual, sobre pilares tan básicos como la demanda de excarcelación de los presos políticos y la defensa de las instituciones catalanas legítimas.

Lo ha explicado su coordinadora general, Marta Pascal, que preguntada sobre si entre las bases de esta candidatura estaría la defensa de la República catalana ya proclamada, ha evitado precisarlo. A todas luces, ello se debe a la percepción creciente de que si no le salen las cuentas el Estado intentará forzar alguna ilegalización justificándola en este apoyo a la independencia ya proclamada.

«Por el PDeCAT no va a quedar», ha dicho Pascal sobre esta propuesta de acuerdo. Ha añadido además que cree que el partido que dé la espalda a una suma de fuerzas se verá perjudicado en las urnas porque no será entendido por la población.

Las entidades civiles soberanistas también proponen sumar fuerzas, aunque ERC parece muy reacio (en una carta publicada en ‘Avui’ tras su entrada en prisión Oriol Junqueras marca claramente su apuesta por candidaturas diferentes). La CUP empezará a decidir mañana sábado, en un Consejo Político en Perpinyà, pero todo deberá ser refrendado en asamblea el próximo fin de semana. Los plazos apremian: cualquier eventual coalición (como fue Junts pel Sí en 2015) debe registrarse antes del martes, y luego habría otra semana más para nuevas candidaturas en forma de agrupaciones de electores.