En la cocentración de la plaza Consistorial de Iruñea a las doce del mediodía han participado el alcalde de la ciudad, Joseba Asiron, y miembros de la Corporación Municipal. En el acto, la concejala delegada de Igualdad y LGTBQI, Laura Berro, (en castellano) y la concejala delegada de Acción Social, Edurne Eguino, (en euskara), han leido un texto aprobado en la Comisión de Presidencia del Ayuntamiento de Iruñea del pasado 6 de noviembre.
En la lectura en castellano ha participado también Kathya Castellano Resino, refugiada de El Salvador, ya que en la declaración de este año se ha querido visibilizar especialmente la violencia que enfrentan mujeres y niñas refugiadas. El acto ha contado con la traducción al lenguaje de signos gracias a la colaboración de la Asociación Eunate.
Tras la lectura, ha llegado la escritura de los primeros mensajes en el muro instalado en la plaza Consistorial con motivo del 25 de noviembre. El muro permanecerá en este espacio hasta las 20 horas de hoy para que todas las personas que lo deseen puedan escribir sus ideas o comentarios.
El texto aprobado por la Comisión de Presidencia del Ayuntamiento de Iruñea recogía que «manifestamos nuestra repulsa ante todo tipo de violencia sexista producto de las múltiples discriminaciones que sufren las mujeres en cualquier ámbito y contexto» y «nuestro compromiso como Administraciones Públicas a seguir trabajando activamente contra las desigualdades que generan situaciones de vulnerabilidad y de violencia contra las mujeres y las niñas».
También «nuestra exigencia de que se cumpla la Resolución sobre la situación de las mujeres refugiadas solicitantes de asilo en la UE, votada el pasado 8 de marzo, que señala la necesidad de aplicar estrategias integradas contra la violencia de género e inscribir y documentar de manera individual a las mujeres para garantizar su seguridad y autonomía, así como que se reconozcan como persecución y motivos válidos para el asilo en la UE la violencia sexual y de género, la mutilación genital femenina, la trata, el matrimonio forzado, los crímenes de honor y la discriminación por sexo amparada por los Estados, con recursos humanos y materiales adecuados».
La declaración continúa con la manifestación de «nuestra solidaridad con las mujeres agredidas o asesinadas, con las mujeres y niñas que enfrentan la violencia sexista» y con la invitación «a toda la ciudadanía a seguir mostrando su rechazo y su compromiso con la erradicación de la violencia contra las mujeres, la denuncia de todas las manifestaciones de control patriarcal y de limitaciones y condicionamientos del ejercicio de la libertad y la autonomía de las mujeres y a participar en todas las actividades que se organicen en torno al 25 de Noviembre».
El documento finaliza señalando que «solo así podremos avanzar hacia sociedades más sostenibles, democráticas justas e igualitarias y hacia la construcción de comunidades más solidarias y habitables».
Concentración en Barañain
Ante el Ayuntamiento de Barañain también ha tenido lugar una concentración contra la violencia de género dentro de la la campaña ‘Ayuntamientos contra la violencia de género. En la misma se recoge que «han pasado 18 años desde que la Asamblea General de las Naciones Unidas asumiese la reivindicación feminista de señalar un día en el que la violencia contra las mujeres fuese visibilizada y rechazada a escala mundial, invitando con ello a la reflexión y asunción de compromisos, tanto a los gobiernos e instituciones públicas, como a los organismos internacionales y sociedad civil. En estos 18 años, cada 25 de Noviembre, hemos reparado en el carácter estructural de la violencia machista siendo esta una de las manifestaciones de las relaciones asimétricas de dominación hacia las mujeres sobre las que se construye el patriarcado. Cada 25 de Noviembre hemos querido visibilizar las múltiples formas y expresiones de violencia que enfrentan las mujeres y las niñas en todas las partes del mundo solo por el hecho de ser mujeres y niñas, hemos profundizado en la identificación de cada uno de los ámbitos en los que es ejercida esta violencia, y hemos exigido recursos y medidas específicas para la erradicación de la misma».